El primer ministro griego, Alexis Tsipras, presentará ante el Parlamento una moción de confianza para preguntar sobre la continuidad de su Gobierno, según una fuente del Ejecutivo que ha previsto esta votación para después del 20 de agosto, fecha en la que Grecia debe hacer frente a un vencimiento de deuda con el Banco Central Europeo (BCE).

Tsipras ya había dicho que convocaría un congreso extraordinario de su coalición, SYRIZA, para determinar hasta dónde llegan las discrepancias internas, que han vuelto a quedar este viernes de manifiesto durante la votación del tercer plan de rescate.

El primer ministro quiere también un posicionamiento claro de sus compañeros dentro del Parlamento y, una vez superados los trámites partlamentarios del rescate --gracias al apoyo de la oposición-- se someterá a una moción de confianza que, en caso de no superar, le obligaría a dimitir.

La Constitución griega establece que, para solventar este tipo de votación, un Gobierno necesita lograr el apoyo de una mayoría absoluta de los diputados presentes en el momento de la votación. Este umbral, sin embargo, no puede ser menor a los dos quintos de la Cámara, es decir, 120 diputados.

Este viernes, sólo 118 miembros de SYRIZA y de su partido aliado respaldaron el plan de rescate, lo que en principio le sitúa por debajo del umbral mínimo. Sin embargo, algunos de los diputados que han votado en contra de la ayuda de la UE y el FMI sí han dicho públicamente que respaldan la continuidad del Ejecutivo.

Un diputado del principal partido de la oposición, el conservador Nueva Democracia, ya ha descartado que pueda apoyar al Gobierno como sí ha hecho en el caso del rescate. "¿Nueva Democracia dando al Gobierno un voto de confianza? No hay ninguna posibilidad de que ocurra", ha dejado claro Makis Voridis al término de la sesión parlamentaria.