Grecia y sus acreedores retomaron hoy las negociaciones para pactar un tercer rescate, con el objetivo de cerrarlo a más tardar este martes y poder someterlo a votación en el Parlamento heleno el próximo jueves.

Las conversaciones se reiniciaron tras una pausa de algo más de seis horas, después de que la ronda de negociaciones entre los ministros de Finanzas, Euclides Tsakalotos, y de Economía, Yórgos Stathakis, y los jefes de las instituciones se prolongara hasta las tres y media de la madrugada de hoy.

Al término de esa reunión fuentes del Gobierno citadas por los medios locales señalaron que se ha avanzado bien y que ahora se trata de revisar "línea por línea" el texto final.

El objetivo es cerrar hasta mañana el programa de rescate, que irá unido a un primer paquete de reformas.

Este paquete legal es un requisito previo para poder obtener el primer desembolso.

Grecia espera obtener 24.000 millones de euros, de los que 10.000 millones destinaría a la recapitalización de la banca, 7.200 millones a devolver el crédito puente obtenido de los socios en julio, otros 5.000 millones al pago de vencimientos al fondo Monetario Internacional y al Banco Central Europeo (BCE) para agosto y septiembre.

El resto se destinaría a cubrir parte de los pagos atrasados del Estado hacia sus proveedores, cuyo monto total asciende a unos 5.000 millones de euros.

En caso de que pueda cumplirse este calendario, el jueves el Parlamento podría votar tanto el texto del programa de rescate como el paquete de reformas, y un día después el Eurogrupo podría darle oficialmente luz verde.

Una vez obtenida la aprobación del Eurogrupo -según los medios locales, posiblemente por teleconferencia- el texto podría ser sometido a votación en la serie de Parlamentos nacionales que lo requieren.

El objetivo final es que el proceso de ratificación y el primer desembolso se produzca antes del 20 de agosto, fecha en que Grecia debe devolver al BCE 3.400 millones de euros, incluidos los intereses.