Bankia obtuvo un beneficio neto atribuido de 556 millones de euros en la primera mitad de 2015, un 11,5 % más que un año antes, gracias al avance del margen neto, las menores provisiones y pese a haber ajustado al alza las cuentas de 2014 bajo los nuevos criterios contables.

Según informó hoy la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sólo en el segundo trimestre del año ganó 311 millones, un 27,3 % más que en los tres primeros meses del año, mientras que el resultado neto de BFA, matriz de Bankia, llegó a 1.393 millones, un 56 % más que en la primera mitad de 2014.

En las cuentas de Bankia, que son las que realmente reflejan la evolución del negocio, el margen de intereses fue de 1.388 millones en los seis primeros meses de 2015, un 2,8 % menos, aunque si se excluye la aportación de los bonos de la Sareb, que ahora ha sido sensiblemente menor, el margen de intereses habría subido un 6 %.

Los ingresos por comisiones siguieron subiendo y alcanzaron los 481 millones, un 2,9 % más que en el primer semestre de 2014; así, los ingresos típicos bancarios (intereses y comisiones) se elevaron a 1.869 millones y ayudaron a que el margen bruto se mantuviera en 2.029 millones.

Los gastos de explotación, por su parte, se redujeron un 2,7 % respecto a la primera mitad de 2014, hasta 774 millones.

Gracias a la mejora de ingresos y la reducción de gastos, Bankia ganó en eficiencia hasta situarla en el 41,5 %, 1,7 puntos mejor, mientras que el resultado antes de provisiones fue de 1.186 millones, un 3 % más que un año atrás.

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado en un comunicado que la entidad cierra la primera mitad del año con una rentabilidad próxima al 10 %, exactamente del 9,8 %, en línea con el objetivo para todo el ejercicio, y con una "clara mejora" de los resultados en el segundo trimestre.

Por su parte, el consejero delegado, José Sevilla, ha subrayado que las cuentas muestran una evolución favorable en todas las líneas: mayores ingresos, menos gastos y provisiones más bajas gracias a la caída de la morosidad.

Bankia cerró junio de 2015 con un saldo de morosos de 15.308 millones, un 7,5 % menos que un año antes, lo que unido a la venta de carteras de créditos impagados explica que la morosidad pasara del 12,9 % de finales del primer semestre de 2014 al 12,2 %.

La bajada de la morosidad estuvo acompañada de una mejora de las provisiones sobre los créditos dudosos que permanecen en el balance de Bankia, lo que hizo que la tasa de cobertura subiera hasta llegar al 60,6 %, frente al 57,6 % de hace un año.

El saldo de dudosos cae a la vez que el banco nacionalizado reduce el volumen de activos adjudicados, hasta los 2.875 millones de euros de valor neto contable, tras haber vendido 4.135 inmuebles de enero a junio, más del doble que los 1.919 de un año antes.

En cuanto al crédito, en el primer semestre Bankia concedió nueva financiación a familias y empresas por importe de 8.600 millones, un 35,4 % más; de esta cifra, 7.333 millones, un 53,8 % más, fueron a parar a autónomos, pymes y empresas.

Por otro lado, los recursos gestionados de clientes, dentro y fuera de balance, se incrementaron en 1.400 millones, hasta sumar 117.300 millones.

En cuanto a la solvencia, Bankia cerró junio con un capital ordinario del 12,77 %, 49 puntos básicos más que a cierre de 2014, que anticipando a la fecha actual los futuros requerimientos de Basilea III, lo que se conoce en el argot como "fully loaded", se situó en el 11,31 %, 71 puntos básicos más.