El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que los Presupuestos Generales del Estado de 2015 son los que necesita España para salir de la crisis y ha añadido que servirán para que "la recuperación se extienda y entre en todos los hogares".

En su intervención en el pleno del Senado en el que se votan las diez propuestas de veto a los presupuestos, Montoro ha afirmado que las cuentas de 2015 certificarán que hay un futuro, "cada vez más cercano", de prosperidad, de crecimiento económico y de creación de empleo.

El ministro ha incidido en que ahora sí se puede decir que España tiene futuro y que los sacrificios se quedan atrás y que el pesimismo ha sido vencido.

Montoro ha recalcado que las expectativas de mejora se presentan ya con mayor frecuencia e intensidad.

Asimismo ha destacado que España ha recuperado su credibilidad internacional y ha demostrado su solvencia.

También ha subrayado que está a la cabeza del crecimiento y ya crea empleo neto, "gracias a las actuaciones del Gobierno y, sobre todo, al esfuerzo y al tesón de la sociedad".

Además, ha admitido que al Ejecutivo le gustaría que la recuperación fuera más rápida y más intensa y que la crisis hubiera acabado antes, pero ha insistido que las reformas necesitan su tiempo y que de un agujero muy profundo no se sale de la noche a la mañana.

Montoro ha dedicado gran parte de su intervención ha recordar la "herencia recibida" del Gobierno socialista, que dejó una de las mayores crisis económicas vividas con efectos dramáticos para el empleo.

El ministro ha señalado que en la pasada legislatura España fue el país en que más cayó la recaudación tributaria y ha criticado la mala gestión que se hizo del mercado de trabajo.

A este respecto, ha afirmado que en lugar de hacerse ajustes salariales las retribuciones crecieron alrededor del 4 %, lo que provocó que al final se produjera un "ajuste" de empleos, "el más duro vivido por la sociedad española con la pérdida de más de 3 millones de puestos de trabajo.

Montoro ha recalcado que lo que más daño hizo fue la duda que hubo sobre España como un país solvente por la falta de transparencia sobre la evolución de las cuentas públicas llevada a cabo por el anterior Gobierno.

También ha criticado que el PSOE ponga ahora en cuestión el artículo 135 de la Constitución que limita el techo de gasto de las administraciones públicas porque eso supone una pérdida de credibilidad.

En este sentido, ha declarado que este artículo que ha dado tanta estabilidad a la economía se lo quiere llevar por delante el PSOE, "contagiado por la corriente populista de la izquierda antisistema".

El ministro también ha dado un repaso a las medidas adoptadas por el Ejecutivo desde que comenzó la legislatura para salir de la crisis y ha mostrado su agradecimiento a los ciudadanos y a las empresas por sus sacrificios.