Los presupuestos de las comunidades autónomas para el año próximo reflejan una reducción media próxima al 6 por ciento, salvo los de Extremadura, que prevén un incremento del 0,84 por ciento sobre las partidas de 2012.

Algunas cuentas prevén una rebaja de hasta dos dígitos, como las de Castilla-La Mancha y Murcia, o muy cerca de esa cifra, ya que Aragón y la Comunitat Valenciana supera el 9 por ciento.

En Navarra se han devuelto los Presupuestos, por lo que la presidenta, Yolanda Barcina, iniciará 2013 con las cuentas prorrogadas del año anterior.

Aún no se conocen los presupuestos de las autonomías que recientemente han celebrado elecciones -Galicia, País Vasco y Cataluña-, aunque sí algunas orientaciones.

En Galicia, tanto el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, como la consejera de Hacienda, Elena Muñoz, han reconocido que habrá que hacer nuevos ajustes, aunque intentarán que no repercutan en las áreas sociales

La consejera ha dicho que no superarán los 8.481 millones de euros, lo que supone un descenso de más del 3 por ciento en relación con 2012.

Desde la Generalitat de Cataluña se ha reconocido que el recorte será de unos 4.000 millones de euros, lo que supondría también un descenso del 10 por ciento, similar al que tendrá que hacer el lehendakari, Íñigo Urkullu, según dijo durante la campaña electoral.

Frente a las rebajas generalizadas, destaca la subida de las cuentas públicas en Extremadura, de las que su consejero de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, ha defendido que son "por y para el empleo, tanto en la actuación directa para frenar el desempleo como mediante la incentivación de los sectores productivos de Extremadura, pero además son los presupuestos de la Renta Básica".

La consejera de Hacienda y Administraciones Públicas de Andalucía, Carmen Martínez Aguayo, ha explicado que, a pesar de la bajada, se ha optado por dar prioridad al gasto social, al mantenimiento de los servicios y a incentivar la creación de empleo.

Desde el Gobierno de Aragón se destaca que, a pesar del recorte de más del 9 por ciento, las dos terceras partes del presupuesto se destinarán a políticas sociales y 480 millones a un plan para el crecimiento y empleo.

El presupuesto de Madrid, con una reducción de 1.424 millones de euros en gasto público, dedica un 45 por ciento a la sanidad pública e implanta una nueva tasa de un euro por expedición de receta médica.

Con estas cuentas las autonomías intentarán cumplir con el objetivo de déficit fijado para ellas por el Gobierno central, el 0,7 por ciento de su PIB, para el año próximo.

Para mejorar sus ingresos, seis autonomías -Comunitat Valenciana, Murcia, Cataluña, Castilla-La Mancha, Andalucía y Cantabria- ya han manifestado su intención de adherirse al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) de 2013, dotado con 23 millones de euros.

Los fondos se destinan tanto al pago de vencimientos de deuda, prioridad según mandato constitucional, como a la financiación de proveedores.