La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda (IHE) cree que hay que abordar "urgentemente" la reforma del Impuesto de Sociedades, cuya recaudación acumula ya una caída del 60%, si se quiere garantizar el cumplimiento de los objetivos de déficit.

En un comunicado, la organización explica que el descenso de la recaudación es "inexplicable" sólo a partir de la caída de los beneficios empresariales, y habla de dos "agujeros" en el impuesto, que es necesario tapar: la limitación de la deducción de gastos financieros y la libertad de amortización sin obligación de mantener la plantilla.

En el primero de los casos, los Inspectores de Hacienda argumentan que en España muchos ingresos exteriores están exentos del Impuesto de Sociedades, mientras que los gastos financieros realizados para obtener estos ingresos se pueden deducir, lo que supone una pérdida recaudatoria de miles de millones de euros en impuestos de grandes empresas.

Según precisan, España es el único país del entorno europeo en la que se produce esta situación, lo que hace más rentable la inversión exterior que la interior, "fomentando la deslocalización de empresas y la creación de empleo fuera de las fronteras a costa de los empleos españoles".

Por otro lado, la organización señala que la libertad de amortización, beneficio fiscal del que sólo se aprovechan las grandes empresas y que supone un divertimiento indefinido y continuo del Impuesto de Sociedades a pagar a coste cero cuando se realizan inversiones, "supone un quebranto para las arcas públicas que no obtienen ingresos", más aún cuando las inversiones están disminuyendo.

Además, los inspectores explican que esta medida "favorece a las muy grandes empresas, en perjuicio de las pymes, que son las principales creadoras de empleo en España". Asimismo, recalcan que "la supresión del mínimo requisito de mantenimiento de plantilla ha hecho que el Estado esté subvencionando y financiando los EREs de las grandes empresas".