Los datos de la encuesta de población activa (EPA) correspondientes al último trimestre de 2001 revelan un dato escalofriante: fue el sexto peor de la historia de la democracia en destrucción de empleo. El dato lo reveló ayer Luis Garicano, catedrático de Estrategia y Economía en la London School of Economics en el blog «Nada es gratis», de FEDEA. Y no sólo eso. Añade que España lleva 51 meses con la más rápida, y está a punto de ser la mayor, pérdida de empleo de la democracia (y, por tanto, desde la posguerra).

Los peores trimestres fueron los siguientes: el primero de 2009, cuando el empleo cayó el 3,86%; el cuarto trimestre de 2008 (-2,41%), el primero de 1993 (-2,30%), el primero de 1984 (-2,12%), el cuarto de 1992 (-1,97%), el cuarto de 2011, el último que se ha conocido (-1,92%); también el primero del año pasado fue muy malo (-1,39%), el primero de 2010 (-1,35%), los tres primeros meses de 1980 (-1,23%) y los tres últimos de 2009, cuando el empleo se redujo el 1,19 por ciento.

La estadística refleja que de los diez peores trimestres analizados, seis corresponden a la actual crisis. Y además, seis de estos diez corresponden a los primeros trimestres del año.