Gigante. Así se mostró ayer el MMT Seguros en la localidad andaluza de Antequera donde, no sin esfuerzo, se impuso (24-25) a uno de sus rivales directos en la lucha por acabar la liga regular en el "play-off", Meridiano Antequera.

Los zamoranos conquistaron ayer el Fernando Arguelles demostrando, en un choque que se caracterizó por la igualdad, que hoy por hoy son mejores que la formación malagueña. Y es que, a pesar de la delicada situación en la que acudían al encuentro, tuvieron siempre respuesta y un poquito más todo para decantar el duelo a su favor.

Pese a que fueron mejores, los "Guerreros de Viriato" sufrieron de lo lindo para imponerse a un Meridiano Antequera que cedió mucho terreno en el tramo inicial de partido. Un mal arranque que permitió al MMT Seguros ir siempre con "el viento a favor".

Tras igualar la contienda a tres tantos en el minuto 8, el conjunto de García Valiente exhibió su poderío defensivo y con Jortos como estilete de su ataque comenzó a despegarse en el marcador (3-5, m. 10). Sin embargo, el positivo parcial de los hombres de García Valiente tendría un alto coste.

En una acción de contragolpe, el lateral Guillermo se llevó la mano a su muslo y tuvo que abandonar la contienda lesionado. Un contratiempo que, unido a las bajas de los chilenos Reyes y Ceballos -que perdieron ayer 28-23 con su selección ante Anaitasuna-, mermaba aún más la capacidad de un MMT Seguros al que Molina dirigía con acierto.

El contratiempo obligó a García Valiente a poner en pista a su mejor hombre, Octavio, cuya lesión muscular ante Bidasoa Irún le había sacado del siete inicial con posibilidades de no jugar un solo minuto. Una decisión que relanzó aún más a los visitantes.

El bravo central leonés respondió a la confianza de su técnico pese a las notables dificultades físicas que tenía para jugar con normalidad. Su primer gol (5-8, m. 18), fue toda una declaración de intenciones del MMT Seguros, capaz de crecer y crecer a cada nueva adversidad para dominar el encuentro sin apuros durante los primeros compases.

Así y todo, el peor trago para los de Meridiano Antequera llegó minutos antes del final del primer acto, cuando las exclusiones de Alberto Castro y Escobar daban aún más ventaja su oponente.

La superioridad fue aprovechada a la perfección por la formación castellano-leonesa. Peli, con dos bonitos goles, ampliaba a 13 el casillero de su equipo antes de un receso al que el cuadro pistacho llegó con cuatro dianas de diferencia a su favor (9-13).

La afición local se mostraba encantado con los visitantes. Su buen juego y calidad individual se veía reforzado por su coraje, valentía y compromiso. Valores que siempre espera de un Meridiano Antequera que no había dado su mejor versión antes del paso por vestuarios pero que regresó al 40x20 dispuesto a compensar tal hecho.

Imitando la gallardía zamorana, la formación dirigida por Quino Soler empezó a hacer valer el descaro de su mayor juventud y luchó sin desmayo desde el primer segundo por remontar el partido. Una tarea que inició con fuerza, sacando provecho de las exclusiones de Iñaki Gómez y David Sandín, llegando el plantel antequerano a situarse en el luminoso dos goles por debajo de los visitantes (14-16, m. 42).

Con Maireles dando réplica bajo palos a la buena actuación del arquero argentino Leo Maciel, el equipo andaluz contaba con más posibilidades de sumar dos puntos importantes para seguir escalando posiciones en la clasificación. Circunstancia que, sin embargo, no alteró lo más mínimo la tranquilidad con la que se desenvolvió ayer el MMT Seguros. Su solvencia a la hora de encarar cada nuevo aprieto fue digna de resaltar. Ya fuera por medio de su capitán Jortos, o de sus habituales goleadores como Cano, Del Val y Magadán, los zamoranos mantenían el tipo.

Con el partido ya tremendamente igualado en todos los aspectos, la emoción era palpable en el Fernando Argüelles, donde la presión de la grada empujaba a los locales que, sin embargo, estuvieron durante muchos minutos cerca de quedarse sin opciones de pelear por el triunfo. Por fortuna, reaccionó a la perfección a los goles de Molina (14-18) y Abalós (16-20).

Esa respuesta a los dos primeros "match-ball", hizo creer a los hombres de Quino Soler en la victoria. Una fe que se dejó notar en los últimos diez minutos, donde poco a poco Meridiano Antequera recortó diferencias para llegar al desenlace de la contienda con muchas posibilidades de salirse con la suya (21-22, m. 55).

El partido estaba en un puño y los locales por fin mostraban esa lucha constante que les caracteriza y tantos puntos le ha otorgado ante su público. Sin embargo, esa virtud que puede valer por si misma frente a muchos equipos, no sirvió a los andaluces ayer. Y es que, además de contar con grandes jugadores, el MMT Seguros también pelea sin desmayo, de principio a fin.

Con los de García Valiente decididos a cortar su mala racha y dedicar un triunfo a Miguel Camino, todo el MMT Seguros se empleó a fondo en una batalla de corajes que decantó la superioridad técnica de los de Viriato.

Así, Octavio tomó las riendas de la ofensiva zamorana y mantuvo con vida a los suyos de cara a un taquicárdico final en el que los goles de Tello y Díaz dibujaban un empate en el marcador (23-23). Dos buenos goles a los que el central respondió con una nueva diana, para forzar un nuevo empate a falta de un minuto con bola para los zamoranos.

Meridiano Antequera trató de evitar la jugada de estrategia planificada por García Valiente, pero Del Val recibió el balón y acertó a poner un 24-25 al que los locales no pudieron responder debido a la postrera falta de Jortos y la posterior parada de Leo Maciel.

Dos acciones que terminaron de evidenciar el potencial un MMT Seguros que ayer en Antequera no solo supo competir y demostrar que cuenta con recursos para alcanzar sus metas, sino que también expuso la fortaleza anímica y capacidad mental necesaria para lograrlo si sigue dando pasos tan importantes como su victoria de ayer.