La sociedad ha evolucionado en favor de la igualdad, pero todavía queda mucho camino por recorrer, y es que lo logrado hasta ahora no es suficiente. El deporte femenino no es ajeno a los problemas de discriminación por razón de sexo y, de hecho, a veces es centro de polémica y controversia, aunque, tal y como admiten muchas protagonistas "se ha mejorado en los últimos años". En Zamora las deportistas han demostrado su nivel con victorias, campeonatos, récords? pero, en muchas ocasiones, ese reconocimiento viene acompañado de una comparación con los hombres, algo que intentan dejar atrás, aunque aún no se ha conseguido.

En los deportes de equipo, las jugadoras han vivido de cerca situaciones complicadas como es el caso de la capitana del Amigos del Duero, que actualmente milita en la Segunda División de fútbol femenino, que ha vivido escenas dantescas y tiene claro que en los equipos masculinos no sucede. En 17 años como futbolista ha escuchado frases del tipo "vete a fregar", "vete a jugar con muñecas" y desplantes como hace pocas semanas cuando el equipo se quedó sin vestuario en el que cambiarse en su visita al Atlético de Madrid B porque estaba un equipo de chicos de categoría inferior utilizando el que deberían haberles cedido a ellas. Cynthia Bartolomé está muy sensibilizada con este problema y asegura que "es algo que se ha normalizado en la sociedad y no somos conscientes de ello" pero insiste en que es "un problema grave" que debe paliarse desde la educación, tanto en casa como en las aulas.

Las comparativas con el fútbol masculino dejan en evidencia este problema, tanto en repercusión mediática como social, pero Bartolomé sabe que son los propios jugadores los que pueden ayudar a equiparles y es que, por ejemplo, un solo tuit de Casillas apoyándolas puede tener más recorrido que muchas medidas sociales.

En el mundo del baloncesto también hay diferencias a superar. En Zamora el equipo femenino está en la élite, pero a años luz de la ACB, y no solo en las nóminas a fin de mes. Así lo vive Marina Lizarazu que coincide que una de las claves es "educar en igualdad". La base ha escuchado comentarios del tipo "tiras muy bien, tiras como un tío. Juegas muy bien, como un tío", frases con un machismo implícito que se debe erradicar desde la infancia.

De forma, tal vez, menos directa se viven situaciones de esta índole en los deportes individuales, pero las deportistas también han tenido que superar ciertas barreras. En atletismo, Alma de las Heras sí habla de una evolución desde que ella empezó hasta ahora con más chicas que salen a correr y compiten. "Ha habido una evolución y da gusto ver a tantas chicas practicando el atletismo", apuntó la zamorana quien explicó que ahora, cuando aparece algún problema se denuncia directamente, sale más a la luz que antes. Un ejemplo de mejora es la equiparación de los premios a los vencedores en categorías masculina y femenina, algo por lo que se ha luchado. "Yo nunca me he sentido discriminada de forma directa, pero sí he dejado de ir a pruebas con premios distintos según el sexo. En esa parcela se ha mejorado y ya no sucede o se rectifica porque se denuncian esas cosas, pero hay que seguir peleando por nuestras hijas".

Si hay un deporte insigne en Zamora es el piragüismo y a nivel competitivo las zamoranas, como las del resto de España, han tenido también que "remar" para lograr una igualad que ahora parece más cerca y es que parecen haber dejado atrás el segundo plano en el que estaban. También se ha progresado en criterios de selección con la incorporación de la mujer cano a nivel olímpico, y una prueba clara es que para Tokio 2020 sí se prevé equiparación de plazas, y es que antes había 6 distancias para hombres y solo 4 para damas. "Se está notando, pero aún queda, también a nivel de medios. Un ejemplo es que se habla de 'prueba reina' la sénior masculina o en Sanabria el K-4 masculino?, ha habido un punto de inflexión y se está reconociendo más a las mujeres, pero hay que cambiar la mentalidad", explicaba Laura Pedruelo, palabras a las que se une también Eva Barrios. A nivel personal, no obstante, ninguna de las dos campeonas ha sufrido discriminación directa pero sí creen que hay que seguir dando pasos en esta dirección.

La búsqueda de la igualdad entre mujeres y hombres es un objetivo que, como queda patente, une a todas las disciplinas deportivas que de una forma u otra han experimentado algún tipo de discriminación. La clave para todas ellas está en la educación desde la infancia, tanto en las familias como en el colegio.