Jaime Rosón demostró ayer contar con las cualidades de un gran escalador y optó, hasta los últimos kilómetros, por la victoria en la segunda etapa de "Volta ao Algarve". Una jornada en la que pese a la buena forma demostrada por el zamorano, que cruzó en quinto lugar la línea de meta de Fóia, el ganador fue Michal Kwiatkowski. Aun así, su esfuerzo se vio ampliamente recompensado al hacerse con el segundo lugar de la clasificación general, donde figura con el mismo tiempo que el líder, Geraint Thomas, que entró segundo en meta.

El ciclista británico del Sky encabeza un grupo de cinco corredores con 9 horas, 37 minutos y 49 segundos como tiempo global antes de celebrarse hoy una contrarreloj individual que se antoja decisiva. Una etapa en la que Rosón deberá mostrar la misma entereza que le llevó ayer a pelear por todo frente a figuras como Martin o Mollema, con los que también comparte tiempo.

Volvió a jugar sus bazas con inteligencia el Movistar Team, consciente de tener en Jaime Rosón una clara opción para llevarse una etapa de 187 kilómetros con un decisivo desenlace en subida. Una rampa de 15 kilómetros con un desnivel acumulado del 4,7% en el que había repechos de hasta 9,5% propicios solo para hombres con calidad y músculo en sus piernas.

Por ello, y pese a la fulgurante salida rumbo a la primera dificultad del día, el puerto de Monte Ruivo (4º categoría), con escapada de siete ciclistas una vez superados los diez primeros kilómetros de recorrido, Movistar Team y el resto de equipos con buenos escaladores dejaron hacer a la fuga.

Lukas Pöstlberger (Bora-hansgrohe), Yves Lampaert (Quick-Step Floors), Benjamin King (Team Dimension Data), John Degenkolb (Trek-Segafredo), Marcos Jurado (Efapel), Oscar Pelegri (Rádio Popular-Boavista) y Ricardo Mestre (W52-FC Porto) llegaron a tener más de siete minutos de ventaja pero, cuando la carrera se acercaba al final, su renta disminuyó sin remedio. Entre los puertos de Alferce y Sapeira, su renta era de tres minutos; poco después del inicio del último ascenso, el pelotón ya estaba agrupado.

Restaban nueve kilómetros cuando la fuga claudicó y se abría el tiempo para los hombres fuertes. Era hora de probar suerte y el primero en hacerlo fue Vasil Kiryienka (Sky), que subió en solitario hasta que restaban dos kilómetros para la meta. Un ascenso que seguían muy de cerca Michal Kwiatkowski, Geraint Thomas, Bauke Mollema y el zamorano Jaime Rosón.

Una vez alcanzado Kiryenka, este "remó" todo lo que pudo en favor de sus compañeros, que acabaron llegando a meta por delante de Mollema y Rosón. Thomas repartió premio con eKwiatkowski, siendo para el británico el liderato y para el polaco la etapa; mientras, Rosón cruzaba quinto la meta en Fóia, con el mismo tiempo que sus rivales, manteniendo intactas sus opciones a todo en Algarve.