Saulo Hernández era un hombre feliz tras la victoria, pero dejaba claro que tanto él como su plantilla siempre han creído en sus opciones de salvación, aunque todavía queda un largo camino por delante. "Ellos creen de verdad. Intentamos no mentir y decir las cosas como son. Si en ocho partidos en la primera vuelta hemos tenido en siete de ellos bola para ganar y hemos perdido, no estoy diciendo que vayamos a ganar esos siete, sino que puede pasar. Está complicadísimo porque estamos a cuatro victorias y quedan diez partidos, es un milagro, pero el año pasado decíamos lo mismo". Además, indicó que a sus jugadores siempre les dice que "dado que cuesta lo mismo creer que no creer, y trabajar que no trabajar, vamos a creer, a trabajar y a disfrutar haciendo lo que estamos haciendo y vayamos partido a partido. Al acabar la Liga miraremos la clasificación y veremos", sentenció.

Respecto al encuentro, comentó que llega después de una de las mejores semanas de entrenamiento en la que ha podido contar con todos sus jugadores. Así, el técnico del Aquimisa Queso Zamorano recordó que protagonizaron un partido serio en el que las rotaciones tuvieron un peso importante ya que jugadores que en otros encuentros han tenido menos peso y responsabilidad, ayer tuvieron un papel importante algo que "me enorgullece".