Granada.- La Vuelta más previsible de los últimos años disfrutó en Granada de su segunda jornada de descanso en medio de un debate que oscila entre una falta de alicientes que se refleja en que la general no ha cambiado en la última semana ni un segundo en las cuatro primeras plazas, con el ruso Denis Menchov como indiscutible favorito y el combate entre la UCI y Alejandro Valverde por la presencia del murciano en el Mundial de Stuttgart.

Desde la jornada de Cerler, novena etapa, en la que ganó el italiano Leonardo Piepoli y Menchov estrenó el maillot oro, la general se ha petrificado en las cuatro primeras plazas, y eso que desde entonces la Vuelta vivió su jornada reina en Arcalís y dos etapas de media montaña, Sierra de Cazorla y Monachil, que no sirvieron para que los favoritos aportaran cambio alguno.

Con el tedio por bandera, la Vuelta se encamina hacia Madrid con las fuerzas justas en las piernas de los corredores, castigados por dos semanas de competición. Y con un resultado previsible a favor de Menchov, que cuenta con todos los boletos para renovar el triunfo que alcanzó en 2005.

Otro ruso, Vladimir Efinkin (Caisse d'Epargne), vencedor en los Lagos, se ha convertido en la rebelación de la Vuelta, y el australiano Cadel Evans, segundo en el Tour, no se baja de la tercera plaza.

El primer español, Carlos Sastre, cuarto, admitió que "no se puede derrocar a Menchov" y dudó incluso de alcanzar una plaza en el podio, aunque siempre quedará Abantos para un asalto final por la causa.

El ciclismo español de momento ha aportado cuatro triunfos de etapa, tres de Oscar Freire y una de Samuel Sánchez y tiene seis corredores en el top ten de la general. Aparte de Sastre, Samuel es quinto, Ezequiel Mosquera sexto, otra rebelación a sus 31 años, "Triki" Beltrán séptimo, Carlos Barredo noveno e Igor Antón décimo.

Por delante tres etapas destacadas para intentar asaltar el orden establecido por Menchov y su equipo, el Rabobank. La jornada de los puertos abulenses (jueves), la cita de Abantos (viernes) y la cronometrada de 20 kilómetros de Villalba (sábado). Terreno queda, pero la pregunta del millón es: ¿A quién le quedan fuerzas para dar un golpe a Menchov superior a los dos minutos?

La Vuelta a España vuelve a la carretera con la disputa de la decimosexta etapa entre Jaén y Puertollano, de 161 kilómetros, con dos puertos de segunda y uno de tercera. Los esprinters vuelven a contar con una buena oportunidad para llevarse la victoria.