Ernesto Valverde, entrenador del Barcelona, dijo que la Liga "no está sentenciada", pese a la abultada diferencia de puntos que saca a sus competidores, y se mostró convencido, después de la contundente victoria frente al Real Madrid, que no ganó tácticamente a Zinedine Zidane.

La victoria del Barcelona frente al Real Madrid refuerza en el liderato al equipo catalán, que saca nueve puntos al segundo clasificado, el Atlético de Madrid.

"No está sentenciada la Liga. Llevamos ventaja a los rivales, pero no nos fijamos en eso. Nos interesa sumar puntos, tener sensaciones y mirar hacia adelante", dijo Valverde, que apuntó que "conseguir los puntos es muy costoso pero perderlos se pierden a toda pastilla".

"Todavía queda mucho. Mi intención es que no nos gane ningún equipo, pero igual que pensarán Real Madrid o Atlético y han perdido esta jornada", subrayó.

Valverde analizó el clásico, que su equipo ganó contundentemente, pero pese a ello señaló que no ganó la partida a Zidane.

"No creo que haya ganado la partida táctica a Zidane. Esto es un juego en el que dependes de un detalle, de un momento determinado, y luego el resultado va cayendo. Cuando un equipo pierde todos nos ponemos tremendistas. Lo digo por experiencia, como cuando vine en la última Supercopa de España", manifestó.

"El Madrid se quedó con diez y aún así no le puedes dar por muerto. A veces marcas tú, otras te marcan, y la expulsión son cosas que pasan", señaló Valverde, que reconoció que en la primera le costó a su equipo "superar la primera línea" del Real Madrid.

"Al comienzo del partido nos plantearon una presión muy alta. Reforzaron el centro del campo, nos igualaban hombre a hombre, y nos obligaban a lanzar desde fuera. No podíamos hacer el juego que estábamos acostumbrados, teníamos que pasar la primera línea de presión y a partir de ahí jugar", dijo.

"Aún así tuvimos ocasiones, ellos también, pero el partido estaba abierto, no cerrado y no tenia dueño. Era cuestión de perseverar, conseguimos el control del juego y pudimos jugar más cerca de su portería y tener ocasiones", declaró.

Valverde no quiso entrar a valorar la apuesta por Mateo Kovacic de Zinedine Zidane en su once titular y la suplencia de Gareth Bale e Isco Alarcón.

"No tengo los datos del entrenador del Real Madrid para su alineación. Es un jugador que hizo dos buenos partidos en la Supercopa de España. Yo siempre temo a los rivales por las cualidades que tienen y Kovacic me parece un buen jugador", confesó.

El técnico del Barcelona elogió la actuación de su portero, Marc André Ter Stegen, que realizó varias paradas de mérito que salvaron a su equipo.

"Marc es fundamental, por lo que para y porque es el primero en la salida de juego, en claridad y la calma que tiene. Hay veces que estamos todos alrededor de él pero él está tranquilo", manifestó.

Uno de los jugadores que se quedó sin marcar fue el brasileño Paulinho, que tuvo dos ocasiones claras en la primera parte.

"Jugando como centrocampista tiene mucha llegada. A veces participa en el juego pero sobre todo sorprende en la llegada. Las ocasiones de la primera parte han sido suyas. Tiene mucho trabajo y hace muchos kilómetros. No es un jugador que tiene juego de posición como otros, pero nos ayuda mucho y estamos encantados con él", apuntó.

Por último, Valverde habló sobre el central belga Thomas Vermaelen, que se está asentando en la titularidad como pareja de Gerard Piqué.

"Entrena muy bien, juega muy bien y saca el juego perfectamente. Es un central duro, fuerte y rápido. Le veo todo lo bueno. Es la demostración de que es un gran jugador. A veces ponemos la venda antes de tener la herida con algunos jugadores", concluyó.

Las ''ostias'' a Zidane

Por su parte, el entrenador del Real Madrid, Zinedine Zidane, aseguró que sabe que le van a "meter ostias" en los análisis que se harán posteriores al encuentro por el planteamiento táctico que hizo del duelo.

El técnico francés decidió colocar al croata Mateo Kovacic en el once inicial en el lugar de Isco Alarcón, a quien sentó en el banquillo y después no sacó al campo. Perdió el choque y cuestionado por su decisión reconoció que será criticado por su planteamiento.

"Para nada me arrepiento. Estoy para elegir y tomar decisiones. No me voy a arrepentir de nada. En la primera parte, si metemos goles, el partido sería diferente. Sé que mañana me van meter ostias, pero esto es fútbol", comentó.

"Pero no va a cambiar lo que pienso y hago. Es una decisión mía y la asumo con todas mis fuerzas. Estamos jodidos porque es una derrota que duele mucho, pero no vamos a cambiar nada que vamos a seguir. Ahora a descansar, a pensar en nuestra familia y volver más fuertes", apuntó.

"No voy a dar explicaciones. Estoy tomando decisiones como entrenador y la decisión era Mateo en el campo e Isco en el banquillo. Luego, no he podido contar con Isco. Quería hacer el doble cambio y no se ha podido hacer por la expulsión. Metí a Nacho, pero con un jugador menos cambió el partido. Luego hice el doble cambio (Bale y Asensio). Yo soy el entrenador".

Para Zidane, el Real Madrid empezó muy bien el partido, completó una buena primera parte y tuvo opciones de marcar goles. Después, reconoció que sus jugadores tuvieron un error defensivo en el primer gol y después, el segundo, llegó con una expulsión, la de Dani Carvajal, que complicó la situación.

"Es una derrota que duele. Es lo que hay, lo que nos toca hoy. Estamos mal porque es una derrota que duele. Al mismo tiempo, nosotros no vamos a bajar los brazos. El Real Madrid nunca se rinde pase lo que pase. Es un momento complicado por la derrota, por los tres goles. No merecimos esto, pero es fútbol y es lo que hay", señaló.

"El fútbol cambia. Mucha gente decía eso. Mañana somos nosotros los que estamos hundidos, pero esto es fútbol y hay que aceptarlo. Cuando ganas partidos es muy bonito y cuando pierdes es jodido. Estoy con mis jugadores, lo que han hecho hasta ahora ha sido fenomenal y hoy estamos fastidiados", añadió.

Asimismo, indicó que la Liga aún no está perdida para el Real Madrid porque aún queda mucho campeonato por delante y declaró que cree que Ernesto Valverde, técnico del Barcelona, tampoco debe pensar que su equipo ha ganado el torneo.

Por último, cuestionado por Karim Benzema, defendió a su jugador, silbado por el público del Bernabéu cuando fue sustituido por Nacho Fernández en la segunda parte:

"Siempre voy a defender a mis jugadores. Es cierto que hay momentos más complicados para mí. Hoy es un momento duro. Normalmente es él el que sale y casi siempre le pitan. Esto es lo que sucede cuando un gran jugador pasa por una mala racha. Tengo confianza en él. Nunca suelo bajar los brazos, él tampoco y el resto tampoco. Hoy vamos a recibir muchas críticas y vamos a volver más fuertes que nunca", culminó.