El Innova Chef consiguió ayer su tercera victoria liguera de la temporada al imponerse por 62-67 al filial del Obradoiro en un partido muy ajustado y emocionante que se resolvió en los últimos minutos en favor de los zamoranos. Un encuentro de los que hacen afición, entre dos equipos de fuerzas bastante equilibradas que dio lugar a un auténtico carrusel de alternativas de dominio en la pista y el marcador. Un toma y daca provocado por las muchas oportunidades que ambos equipos tuvieron de romper el partido, así como el poco aprovechamiento de las mismas dando lugar a un choque con mínimas ventajas en favor de unos y otros a lo largo de los 40 minutos.

El duelo podía haber caído de parte de cualquiera de los dos equipos pero, finalmente, lo hizo en favor de un Innova Chef que vio así recompensado su tremendo esfuerzo en tierras gallegas. Y es que, el gran mérito "amarillo" fue poder resultar siempre competitivo pese a contar con únicamente ocho jugadores para la partida. Un escollo que salvó gracias al buen trabajo de todos sus hombres y al buen reparto de minutos que realizó Nacho Domínguez, que utilizó con mucha coherencia las rotaciones de un banquillo tan corto.

El primer acto, sin embargo, no resultó favorable a los zamoranos, que entraron mal en el partido. Hubo errores en el Innova, sobre todo en defensa, lo que fue aprovechado por el Obradoiro, más acertado, para acumular las primeras ventajas, anotando con cierta facilidad. Especialmente desacertado se mostró Jonathan Bosa, sorprendente dada su calidad, que no sumó apenas nada en un equipo muy justo de rotaciones donde Nasarre tampoco tuvo su mejor día a la hora de buscar el aro rival

A pesar de todo el Innova mejoró en el segundo cuarto, especialmente mejorando su defensa y elevando también sus estadísticas de tiro. Raley, Senghor y Johnson fue el triángulo sobre el que se sustentó el juego de los zamoranos, más fluidos en ataque y poco a poco fueron recortando distancias hasta llegar al descanso un punto arriba.

La mejoría fue todavía más manifiesta en el inicio del tercer acto. Los de Nacho Domínguez cerraron con pegamento su defensa y el Obradoiro se estrellaba sin encontrar soluciones, de forma que el equipo zamorano fue aumentando su ventaja pese al desacierto en los lanzamientos de tres puntos, también en el caso del equipo gallego, que buscó el argumento como solución a su falta de pericia para encarar el aro.

El Innova Chef afrontó el último acto con un colchón de siete puntos que no era ni mucho menos suficiente y más porque el equipo gallego apretó en busca de poder darle la vuelta al marcador. Pero resistió el Innova, que no perdió los papeles y que supo mantener sus rentas. En ese contexto se reveló sustancial el trabajo de equipo pero especialmente la aportación de Corey Raley, que terminó con dobles figuras y 31 de valoración siendo un bastión inexpugnable debajo de aro.

Con este triunfo, el Innova Chef encara de forma positiva un tramo de su calendario bastante importante de cara a alcanzar sus objetivos esta temporada ya que los de Nacho Domínguez afrontan ahora dos partidos consecutivos en su feudo, frente a Estudiantes de Lugo