Tres goles encajados en la segunda mitad por segunda salida consecutiva. Diez goles encajados en las últimas cinco jornadas y siete de ellos en los tres partidos que los rojiblancos han disputado fuera de su feudo. El Zamora sufrió ayer su primera derrota liguera y acumula cuatro jornadas sin conocer la victoria, lo que le saca de las posiciones cabeceras de la tabla justo cuando llegan los "gallitos" al calendario de los rojiblancos.

La derrota en Salamanca dejó tocada a la expedición zamorana, no tanto por el resultado, que podría entrar dentro de los posibles al visitar Las Pistas, un campo que no ha visto perder a Unionistas, sino por la forma en la que se produjo, con dos goles en menos de diez minutos y con la sensación de que el conjunto de Losada se disolvió como un azucarillo cuando recibió el primer golpe.

La primera parte dejó buenas sensaciones para ambos conjuntos. Los salmantinos trataban de manejar la bola para acabar llegando al área de Miguel y los rojiblancos, que salieron con casi todas sus armas ofensivas, buscaban matar a la contra.

Miguel Losada salió con Dani Hernández, Javi Rodríguez, Dieguito, César Simón e Iñaki Eguileor en la ofensiva y, aunque tanto Dieguito como Javi Rodríguez enganchaban en el centro del campo, el entrenador salmantino despobló el centro del campo al dejar únicamente a Encinar como ancla del equipo.

Los primeros minutos fueron de dominio alterno y Dani Hernández fue el primero en avisar con un disparo que se colaba en la portería y que acabó despejando a córner Molina.

Los siguientes acercamientos fueron para los charros, buscando una y otra vez la espalda de Aires. Miguel salió, valiente, en un par de ocasiones para desbaratar el peligro de los delanteros de Unionistas.

La grada pidió penalti en una acción de Roberto Levas pero el colegiado no señaló nada y permitió que se siguiera jugando. No fue la única petición de la parroquia salmantina en la primera mitad.

Los rojiblancos, con un juego eléctrico se hacían con el control del encuentro cuando Aires, en la salida del balón, se hacía un lío y obligaba a Miguel a salvar el primero. En la siguiente acción, de nuevo tras fallo de Aires, Adrián salvaba un pase con peligro y lanzaba la contra de los zamoranos que llegó hasta Dani Hernández para que el Zamora se pusiera por delante.

Supieron sufrir los rojiblancos en los minutos finales del primer tiempo cuando Carlos de la Nava gozó de dos ocasiones inmejorables para lograr la igualada pero acabó fallando. Tuvieron los rojiblancos algún acercamiento más, especialmente en las botas de Dani Hernández, pero el descanso llegó con el 0-1.

En la segunda parte, Unionistas intentó arrinconar a los zamoranos, que intentaron aguantar el chaparrón inicial y cabalgaron en las contras hasta tener una clara ocasión que Iñaki no pudo transformar.

El partido pareció cambiar tras una jugada en la que Dani Hernández cayó lesionado, como si el mejor jugador de los rojiblancos arrastrara con él a todo el equipo. El extremo zamorano pudo volver pero ya no tuvo tanta incidencia en un partido que se igualó tras una gran parada de Miguel que no pudo secundar cuando el balón llegó a la frontal para Cristo Medina. Unionistas lograba el empate con un disparo centrado que Miguel no veía salir y que desataba los males rojiblancos. La defensa comenzó a descomponerse y, sin tiempo para la reacción, Medina volvía a lanzar un zapatazo desde fuera del área y en esta ocasión Miguel podía hacer bastante más para detenerlo pero veía como los charros le daban la vuelta al electrónico.

Quedaba media hora por delante pero ni los cambios de Losada ni los jugadores que se mantuvieron en el once daban sensación de respuesta ante el segundo tiempo de los charros. Javi Bueno, Aleixo Cabral y Rafael Silveira fueron los elegidos por Miguel Losada para darle la vuelta al encuentro pero con un Zamora en clara fase descendente, lo que acabó llegando fue la sentencia blanquinegra.

Un centro de Cristo Medina, hombre del partido, lo acabó rematando, completamente solo Motos, llevando la euforia a Las Pistas, que sigue invicto en los partidos oficiales de Unionistas.