Decepcionados. Así abandonaron ayer jugadores y aficionados del MMT Seguros el pabellón Ángel Nieto tras el primer partido del conjunto zamorano en su segunda aventura en la Liga Asobal. Un encuentro frente a SD Teucro que acabó con empate a 28 goles en el marcador, luminoso que antes de la recta final del envite llegó a señalar hasta cinco goles de ventaja para los pistacho. Una renta que se evaporó fruto de precipitaciones y fallos en la recta final.

Apenas restaban unos segundos de partido cuando el recién llegado Silva se elevó para intentar afianzar la victoria del MMT Seguros en una de esas jugadas que los pistacho, con uno menos en pista y sin el brazo de los colegiados en alto, gustan estirar hasta el infinito. El carioca, con apenas un día en Zamora, intentó eregirse en héroe pero su intento se estrelló en la madera permitiendo el empate visitante. Fue un cara o cruz cruel que el bueno de Anderson intentó compensar fuera de tiempo con un tiro que paró con acierto el meta de un SD Teucro satisfecho por el empate. Todo lo contrario que los zamoranos, a los que una vez más se les hizo demasiado largo un partido en la máxima categoría. Y es que, hasta poco antes de ese amargo punto de mala fortuna en forma de travesaño, los "Guerreros de Viriato" realizaron un buen encuentro en el que acumularon méritos para una victoria que no fue tal.

El primero de los logros ayer del MMT Seguros fue remontar su frío inicio de partido. Octavio anotó el primer gol de la nueva etapa de su equipo en Asobal pero, lejos de sentirse intimidado, SD Teucro respondió con fiereza y un parcial de 0-4 que dejó helado al Ángel Nieto.

Del apuro salieron los zamoranos a base de trabajo, poco a poco. Con Mouriño rompiendo la mala racha de lanzamientos desde un pivote en el que tanto él como Abalós rindieron con nota. Aún así, el bloque local tardó en poder neutralizar la renta gallega, generada por las intervenciones de Lloria y el cañón que tiene por brazo el cubano Balázquez (3-6, m. 12).

Los visitantes se defendían con todo en el Ángel Nieto, y ese exceso de empeño a la hora de secar la ofensiva local se vio correspondido por varias exclusiones. Inferioridades que permitieron al MMT Seguros tomar aire y recuperar la confianza en su juego. Ese que siempre comienza desde atrás, desde la portería.

El año pasado Maciel era el inicio del ataque y, este año, lo es un Carlos Calle que firmó un gran partido en el arco zamorano. Sus primeras grandes paradas combinadas con los goles de Abalós y Fafa iniciaron una remontada que culminó con un gol desde su casa Jortos y otro de Marc con un espectacular giro para lanzar en seis metros (7-7, m. 15).

Pese a salvar el primer escollo, el MMT Seguros tuvo que hacer seguir creciendo para dominar el envite porque SD Teucro no tiraba la toalla. Y, poniendo más empeño y calidad al juego, llegó la hora de Adrián Prieto.

La entrada del primera línea al partido fue un soplo de aire fresco para el ataque zamorano. Sus dos primeros goles y la conexión con Fafa permitieron al MMT Seguros mantener el empate en el luminoso pese a la exclusión de Abalós (11-11, m. 26).

La segunda unidad, con el debut de Silva en Zamora o de Jaime González en la Liga Asobal, estuvo brillante. El extremo hizo el gol número 11, el carioca el 12 y Peli hizo brincar la grada con el primer gran contragolpe de la temporada haciendo el 13-12 con maestría a pase de Jortos. El MMT Seguros, ese que se apoya en el colectivo, había vuelto y ni siquiera el enésimo misil "cadera-red" de Balázquez evitó que, con una parada de Calle, los locales se fueron al descanso mandando (14-13).

Si el final del primer acto fue notable, el inicio zamorano en la reanudación fue para enmarcar. Un minuto le duraron las dudas a los "Guerreros de Viriato" que, con Calle parando a diestro y siniestro, pusieron la directa ante un SD Teucro cuya apuesta por jugar sin portero en inferioridad le salió "rana".

Gastón emuló a su manera el tanto de Jortos en la primera mitad y puso la primera diferencia seria en favor de los locales en el minuto 35. (17-14). Y, aunque hubo una pequeña "sequía" goleadora en los instantes posteriores, un "costa a costa" de Octavio y un gran gol de Anderson forzaban a SD Teucro a tratar de parar el partido con un tiempo muerto (21-18, m. 44).

El receso, curiosamente, le vino mejor a los locales, que estaban firmando un estreno glorioso. Como el de Raúl Maide, que en sus pocos minutos en pista hizo gol y sirvió en bandeja el 23-20 al sobresaliente Fafa. Hasta los siete metros, suerte nefasta para el cuadro pistacho cada año, entraban. Octavio transformó el primero de la temporada (24-21, m. 40). La victoria parecía cerca. Aún más cuando Calle anotaba desde su arco el 25-21 y Anderson, a falta de ocho minutos, ponía cinco tantos de diferencia en el tanteo. Sin embargo, la actuación zamorana se fue al traste.

Ocurrió de pronto. Después de ver la meta como si de una portería de fútbol se tratara, el MMT Seguros se estancó en ataque tras anotar Silva en rectificado su quinto gol de la tarde (28-24, m. 55).

La falta de acierto en el lanzamiento condenó al MMT Seguros. La imposibilidad de anotar en los siguientes minutos fue una pesada losa para los "Guerreros de Viriato", que se fueron desesperando poco a poco. Llegaron los tiros a destiempo y los agujeros en una defensa en la que, para colmo de males, también empezó a flojear.

Ni siquiera una nueva intervención milagrosa de Calle a falta de dos minutos hizo reaccionar al MMT Seguros, cuya confianza se evaporó repentinamente ante un SD Teucro que tardó escasas milésimas de segundo en creer que podía sacar tajada del Ángel Nieto.

El murmullo en la grada se disparó cuando, solo ante Santana, Adrián Prieto no pudo anotar en una jugada que acabó en exclusión de Mouriño y gol visitante. Un tanto, el 28-27, que a falta de un minuto complicaba mucho la victoria a los zamoranos.

La grada se veía venir el final, recordando lo que ocurrió frente a Puente Genil. Y, la desgracia, se repitió. SD Teucro anotó su siguiente ataque y defendió con firmeza a un MMT Seguros que, tras el 28-28, fue incapaz de lanzar a portería durante los últimos 40 segundos de partido que tuvo para reaccionar y evitar estrenarse con un empate de regusto amargo.