La selección española de baloncesto empieza hoy (17.45 horas/Cuatro) el asalto a las medallas en el Eurobasket con el duelo de octavos de final frente a la anfitriona Turquía, que se apoyará en la "caldera" que promete ser el Sinan Erdem Arena para paliar la diferencia de talento entre ambos equipos y buscar la sorpresa.

La lesión de Álex Abrines, cuya baja ya se ha confirmado para el resto del Eurobasket debido a la presión de Oklahoma City Thunder, ha sido el único contratiempo que ha mermado al equipo español en Rumanía, donde completó una primera fase impecable con pleno de victorias. España extendió así a 11 su racha de triunfos consecutivas en un Eurobasket, donde su última derrota data del 8 de septiembre de 2015, cuando perdió ante Italia en la fase de grupos.

Tan solo la Eslovenia de Doncic se mantiene invicta además de España en este Eurobasket, donde los pupilos de Scariolo han ganado sus partidos por 29 puntos de diferencia en promedio. Sin embargo, las eliminatorias borran todas esas estadísticas y las 16 selecciones supervivientes empiezan otra vez de cero.

Turquía parte con el teórico rol de víctima visto su rendimiento en este Eurobasket, donde solo ha podido ganar a las ya eliminadas Gran Bretaña y Bélgica y ha sucumbido ante Serbia, Rusia y Letonia. Por ello, necesitará más que nunca el apoyo de los 15.000 aficionados que abarrotarán el Sinan Erdem Arena.

Más allá del apoyo de la hinchada y de su capacidad para desequilibrar a unos árbitros que no son los mejores del continente, en el plano puramente deportivo el equipo otomano tiene como principal referencia al joven alero Osman, que acaba de fichar por Cleveland Cavaliers y está promediando 17,6 puntos, 5,2 rebotes y 4 asistencias en el Eurobasket. Las otras dos referencias para el seleccionador Sarica son el escolta Mahmutoglu y el pívot Erden, que necesitará multiplicarse ante el poderoso juego interior de su rival, ya que se enfrentan el equipo más reboteador del campeonato como es España.