El eslovaco Peter Sagan (Bora-Hansgrohe) ganó ayer la tercera etapa del Tour de Francia, entre Verviers y Longwy sobre 212,5 kilómetros, al imponerse en el primer muro de la ronda gala a Michael Matthews (Sunweb) y a Daniel Martin (Quick-Step Floors), en un final en el que los mejores no fallaron y Geraint Thomas (Sky) se mantuvo como líder de la general.

La selección final en el muro de Longwy, en una cota de las Religiosas de prácticamente 2 kilómetros al 5,8% de pendiente media y rampas muy duras de hasta el 11%, la hizo el BMC y sobretodo su líder Richie Porte, que de entre los "gallos" fue el primero en cantar y en hacerlo con más fuerza.

Sin ataques, fue Porte quien relevó a su compañero en el BMC Nicolas Roche al frente del pelotón en las rampas más duras de la subida final, tirando con fuerza y energía para enfilar al grupo y teniendo a su rueda al español Alberto Contador (Trek) y al polaco Rafal Majka.

Peter Sagan, paciente, llegó a rueda del australiano y le adelantó. Pese a ver cómo se le salía el pie derecho del pedal en pleno esfuerzo y en subida, se recuperó para ganar y sumar su octavo triunfo en el Tour, aguantando a Martin y a un Matthews, ahora tercero en la general, que de haber tenido la etapa unos metros más le hubiera sobrepasado.

En un final ideal para hombres explosivos, Sagan demostró su fortaleza y el actual doble campeón del mundo no tuvo rival pese a ese impedimento técnico con el pedal. Mientras, "Dan" Martin avisó de que sus piernas están fuertes en este arranque de Tour. Cuarto, pese a ser el líder del BMC para esta etapa, entró el belga Greg van Avermae.

Por su parte, el líder de la general Geraint Thomas y su compañero y jefe de filas en el Team Sky Chris Froome entraron en meta octavo y novenos respectivamente, por delante de Majka, Nairo Quintana (Movistar) o Romain Bardet (AG2R), que tuvo que cambiar de bicicleta a más de 30 kilómetros de Longwy por un problema mecánico bien solventado.