Maverick Viñales (Yamaha YZR M 1) volvió ayer a sonreír y a ser el referente para todos sus rivales, por lo visto en la primera jornada de entrenamientos para el Gran Premio de Holanda de MotoGP, que se disputa este fin de semana en el circuito de Assen.

Viñales, con un mejor tiempo de 1:33.130, puso tierra de por medio respecto a sus inmediatos perseguidores, el también piloto de Yamaha, el alemán Jonas Folger, y el vigente campeón del mundo, el español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 ).

La primera jornada de entrenamientos no transcurrió de igual manera para todos los contendientes y mientras que no se tardó demasiado en ver a Maverick Viñales y a Marc Márquez en las posiciones de cabeza, no sucedió lo mismo con otros protagonistas como el italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) y, sobre todo, el español Jorge Lorenzo (Ducati Desmosedici GP17), demasiado tiempo en las últimas posiciones de la clasificación.

Lorenzo, uno de los pilotos a los que más se vio "sufrir" en pista, consiguió una cierta mejoría para pasar de la vigésima primera a la decimocuarta plaza en la vuelta final, en la que intentó arañar algunas décimas a su mejor tiempo y si bien logró ese objetivo en realidad no le sirvió para avanzar en la clasificación.

El italiano Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP17), vencedor de los dos últimos grandes premios disputados hasta la fecha, parece continuar por el "buen camino", si bien la cuarta plaza de entrenamientos, a algo más de seis décimas de segundo de Maverick Viñales, indica que todavía queda trabajo por hacer en un trazado que se da muy bien a las Ducati y en donde el pasado año el más rápido de entrenamientos fue, precisamente, él. "Hoy me he sentido fuerte, como siempre, desde la primera vuelta, como cuando estábamos dominando claramente los entrenamientos y luego me sentía igual de fuerte en carrera y en Assen hemos tenido una buena puesta a punto y, sobre todo, hemos trabajado bien en la electrónica", reconoció.