"Siempre hay algo que sepas y puedas hacer" le dijo un día Segismundo Ferrero a Didia Liedo para convencerla de que se uniera a su proyecto. Fueron unas "palabras mágicas" del, hasta ayer, presidente en funciones que llevaron a la nueva máxima mandataria del club a sumar una nueva pasión a su vida: el Zamora CF. El primer paso de Liedo antes de lanzarse al ruedo de presidir al club rojiblanco.

Con un apretón de manos y dos besos quiso traspasar los poderes Ferrero a Liedo, agradeciendo el "trabajo realizado" durante los dos años que estuvo en su junta. Unas palabras de aprecio que tuvieron su espejo en el discurso de la nueva presidenta, que valoró el "esfuerzo y el trabajo" de un Segismundo Ferrero que quiso despedirse deseándole mucha suerte a los nuevos inquilinos de la planta noble del Ruta de la Plata.

Quiso Liedo que sus primeras palabras como la capitana de la nave rojiblanca fueran para repasar su historia: desde sus pasiones y ocupaciones fuera del Zamora CF hasta los dos años en los que trató de reflotar el navío.

"El primer año de mandato en este mundo de hombres intenté de aportar lo que podía aportar. En el segundo intenté aportar y mostrar mi opinión en todas las decisiones y desde hace meses mostré mi desacuerdo con las decisiones que se tomaban, pero siempre las respeté" analizaba Liedo sobre el trabajo en la Junta Directiva rojiblanca. Su dimisión, que se produjo antes de la última jornada, se retrasó porque la "situación del primer equipo" le hacía "desistir de la dimisión".

Tras "varios meses de tenso ambiente" en las reuniones de la Junta Directiva, finalmente acabó legando la dimisión cuando "no perjudicaba al equipo ni a la directiva" al estar la temporada acabada. "En ningún momento traicione al presidente ni a la directiva" quiso aclarar, de forma tajante, Didia Liedo, que desgranó todas las reuniones que la directiva tuvo con la plataforma de socios antes de que, durante la asamblea, Ferrero daba sus motivos para votar por el no, una decisión que Liedo no compartía pero que respetó.

En su discurso de bienvenida quiso dejar claro que no es una mujer de fútbol y, por eso, se había rodeado de gente que ha desempañado cargos importantes en diversos clubes de la capital. "No partimos de cero" quiso explicar Liedo sobre un proyecto que ya había expuesto antes de presentar la candidatura.

Por último, la actual presidenta lamentó que finalmente no hubiera más propuestas para que los socios eligieran. "No hemos venido para dividir al Zamora, sino para aunar esfuerzos" declaraba Didia Liedo acompañada de gran parte de su Junta Directiva.