El Construcciones Tevisa terminó el pasado sábado su participación una temporada más en la Segunda División del balonmano nacional y lo hizo con un triunfo que le permite cerrar la campaña con buen sabor de boca si bien el octavo puesto logrado por el filial del Balonmano Zamora no es un gran resultado.

El cuadro dirigido por Diego Vieira terminó el campeonato con una visita a cancha del Finca Torremolinos Villa de Aranda que solventó sin demasiados apuros. Los zamoranos ganaron la contienda al colista por un abultado 23-35 en un encuentro con poca trascendencia para ambos conjuntos pues ambos se jugaban poco más que la honra de terminar el año con victoria. Solo el Construcciones Tevisa podía encarar el duelo con algo más de ambición que su rival mirando la clasificación, ya que podía dar el salto a un octavo puesto que acabó conquistando gracias a la derrota del CP Bejarano en el feudo de un Balonmano Cuatro Valles que acabó como tercer clasificado.

La octava plaza se antoja un puesto simplemente aceptable para el filial del MMT Seguros. Y es que, en determinados partidos frente a los equipos punteros del campeonato, ha demostrado contar con potencial para luchar por más. Sin embargo, al igual que le ocurre al primer equipo, la regularidad no ha sido su punto fuerte. Más allá del juego, a la hora de obtener réditos de su desempeño sobre la pista.

Pese a esta realidad, el Construcciones Tevisa ha aportado mucho al MMT Seguros, cumpliendo perfectamente su función formativa. Además, hay que tener en cuenta que los cambios en su plantilla no ayudaron a rendir de forma óptima desde el primer día, un hecho que seguro se dejará notar la próxima campaña.