Derrota del Innova Chef a domicilio ante el Calidus Gallego COB, tras un partido tremendamente igualado y plagado de alternativas en el juego y en el marcador pero en el que los zamoranos fueron de más a menos hasta acabar desinflados en el último cuarto y defintivo.

Los primeros minutos fueron un toma y daca muy interesante, un partido bonito de ver en el que los dos quintetos se mostraban ambiciosos en lo ofensivo pero además jugaban muy serio. El visitante Adams se erigió en el gran protagonista entre los suyos pues anotó muchos puntos en un luminoso plagado de alternativas y en el que ni uno ni el otro equipo fueron capaces de coger una renta superior a una canasta. El primer triple del encuentro no se vio hasta el ecuador del cuarto, obra de Guillermo González, y aunque abrió la veda con una respuesta idéntica e inmediata del local Arriaga y una contrarespuesta visitante de Vela, no sirvió para que el marcador se rompiera a favor de nadie, 19-20 a falta de minuto y medio, ni siquiera más allá del mal final de cuarto por parte de un Innova Chef que por primera vez estuvo indeciso a la hora de finalizar, 24-20.

En el comienzo del segundo el parcial local creció hasta ser un 7-0, pero sólo hasta ahí porque Quintero puso freno con un triple pero sobre todo porque los visitantes ahora defendían mucho mejor que antes. El Virgen de la Concha apretó los dientes cerrando su pintura a cal y canto, y aunque no tuvo la precisión en el tiro anterior sí supo remar hasta voltear de nuevo el marcador y ponerlo a su favor, 28-30 superado el ecuador y con otro triple de Vela. Al poco la ventaja de seis puntos era para los visitantes y de nuevo el partido se alocaba tras una fase de mucha contención. Ambos buscaron el triple, encontrándolo menos veces de lo deseado, y de nuevo se llegó al final del cuarto con todo en el alero, pero en esta ocasión el Virgen de la Concha tuvo más tranquilidad y pausa en ataque y a la llegada del tiempo de descanso estaba por delante, 41-43.

Tras el descanso ambos equipos salieron tomando muchas precauciones, todo estaba muy igualado y ninguno quería cometer errores que pudieran costar canastas fáciles, porque a los dos les costaba mucho dominar el juego. El juego se tensó como nunca antes, se vieron ataques largos y una pelea bonita y sin ganador en las pinturas. Fue una fase de pocas canastas hasta que dos triples consecutivos de Guillermo González colocaban una nueva máxima en el choque, 43-51, que sin embargo duró un instante pues Bulashvili también anotó de tres y apenas un minuto después el marcador vovlía a estar igualado, 51-51 en el ecuador. De ahí al final del perido todo se ajustó mucho más y baste decir que en cuatro minutos y medio los zamoranos sólo encestarían una canasta más, 58-53 y comenzaban los problemas.

En el último cuarto los problemas de anotación zamoranos se hicieron más evidentes que nunca porque aunque Vuckcevic anotó un par de triples rápidos, 64-59, éstos sólo sirvieron para maquillar la sequía de los visitantes, que desaparecieron por completo en ataque tomando siempre muy malas decisiones. Sin hacer nada del otro mundo los gallegos cogieron una ventaja impensable en un duelo tan igualado, 69-59 en el ecuador y tiempo muerto visitante. Pero además la cosa no fue a mejor, empeoró y en el último tramo los locales lograrían llevarse el triunfo sin tampoco hacer casi nada.