El estadounidense Sam Querrey derribó el sábado a Rafa Nadal y dio la sorpresa al ganar la final del Abierto Mexicano de Tenis 2017 disputado en Acapulco.

Querrey se impuso al español con parciales de 6-3, 7-6 (3) y le quitó el invicto al español en la competición mexicana, en la que ganó los títulos de 2005 y 2013, cuando el torneo se jugaba en arcilla y en la que encadenó 14 triunfos con los cuatro de esta semana.

En su camino al título, el estadounidense eliminó al británico Edmund en primera ronda y luego dio cuenta de cuatro favoritos al título, el belga Goffin (5), el austríaco Thiem (4), el australiano Kyrgios (6) y Nadal (2).

Desde el primer servicio de ambos se perfiló la tónica del partido. Querrey sirvió en cuatro ocasiones para alcanzar el 1-0 y Nadal necesitó trabajar más su saque y los puntos para igualar.

El estadounidense, con una bazuca como brazo, se hizo con su segundo juego y resistió los iniciales ataques de Rafa, aunque terminó por ceder ante el español, que logró el 2-2.

Querrey registró saques de hasta 210 km/h y con ellos se abrió camino, en algunos mediante su primer servicio y otros con saque, volea y remate, ejercicios que fueron sus principales herramientas y con los que marcó su triunfo.

Con solvencia, Querrey se colocó con 3-2 pero Rafa respondió de la misma manera para el 3-3 y posteriormente no le dio oportunidad a Rafa en el 4-3 al que llegó tras cuatro disparos.

La oportunidad para que Querrey tomara ventaja llegó en el octavo juego. Rafa abrió con doble falta, falló un remate y Sam restó para el quiebre y el 5-3. Después repitió su fórmula con su servicio y cerró para el sorpresivo 6-3.

Fue el primer set perdido por Nadal en 15 partidos en Acapulco, después de que en 14 partidos previos hubiera ganado en dos sets y no se preveía por donde Rafa podía lastimar a Querrey.

En el segundo parcial, Nadal inició con la defensa de su servicio y provocó errores de Querrey, quien resistió y ganó su juego para el 1-1. No solo el estadounidense metió su primer servicio con fuerza, el español también disparó con potencia pudiendo colocarse 2-1.

Cuatro disparos le reportaron a Querrey el 2-2. Nadal buscaba respuestas con su "drive", pero no las hallaba, dejó remates en la red o se iba ancho por los laterales, mientras que el estadounidense seguía tomando confianza.

Nadal sufrió para conseguir el 3-2 mucho más de lo que Querrey lo hizo para alcanzar el 3-3 y luego el español tomó ventaja de 4-3 y abrió la puerta para el quiebre, pero el estadounidense mantuvo la calma y resolvió con su saque para lograr el 4-4.

Ambos trabajaron para defender sus servicios hasta llegar al 6-6, siempre más difícil para Nadal que para Querrey y forzaron el "tie-break".

Se fueron parejos hasta el 3-3 pero luego vinieron los errores de Nadal. Querrey tomó distancia y encaminó el desempate para conseguir el 7-3 definitivo, demostrando que, como apuntó Nadal, ayer "fue mejor".