Luis Enrique envió un mensaje claro para los que durante las últimas semanas han dudado de la armonía en el vestuario del Barça: "Se ha podido ver la actitud de los jugadores en el partido, todos unidos". Sobre las variantes tácticas, el entrenador asturiano aseguró que su intención era llenar el centro del campo: "En la primera parte ha sido muy difícil por su presión y el estado del campo, malísimo para la circulación de balón. En cambio, nos ha beneficiado en los dos goles y a ellos les ha perjudicado en la única transición de Griezmann. En la segunda mitad hemos podido conectar más. Ellos jugaron Liga de Campeones entre semana y les ha costado mantener la presión".