El STX Express cayó en Xove por 3-2 en un partido muy igualado y que acabó decantándose para los intereses gallegos en el último minuto, en una jugada aislada en la que Marcos fue capaz de batir al portero zamorano. Hacía cinco partidos que los gallegos no ganaban y habían perdido puntos en los últimos minutos. Esta vez, la víctima de esa suerte fue el FS Zamora.

Se adelantaron en el marcador en el minuto 1 los locales, gracias a un libre indirecto de Marcos, en el que Imanol poco pudo hacer. El STX Express lo intentó todo en esos primeros instantes del partido pero el Xove estuvo muy atento y cerró su portería.

Hubo mucho ritmo, ocasiones claras, por ejemplo, de Morales o Guille, que no consiguieron batir a un Pajaredo muy ambicioso y con mucha garra. Sin embargo, la primera parte acabaría así, con un 1-0.

En la segunda parte, el conjunto zamorano intentó llegar más a la portería rival. Por mediación de Guille, que estrelló el balón al palo en dos ocasiones, rondó el gol pero fue Keko quien arrancó el carrusel de goles de los últimos diez minutos con el 2-0. Un resultado del que los visitantes aún pudieron levantarse gracias a Antonio. Él pondría las tablas en el marcador en tan solo dos minutos para el final, apostando entonces por la victoria con cinco jugadores y sin portero.

La decisión fue determinante porque permitió a Xove hacer lo que había sufrido en los últimos encuentros gracias a un último gol de Marcos a falta de 40 segundos para el final.

Un final cruel para el STX Express FS Zamora que, si bien no jugó un buen partido en Xove, quizás mereció al menos el empate en su visita ayer a tierras gallegas.