Evidentemente satisfecho tras un duro triunfo, Eduardo García Valiente reconoció que el juego mostrado por su equipo en la primera mitad es "el caminio a seguir" para el MMT Seguros. "Una guía de como jugar y el objetivo a alcanzar".

Para el entrenador charro, el encuentro tuvo "una primera mitad fantástica en todos los aspectos" por parte de sus jugadores. "La defensa estuvo brillante, acompañada por la portería, y tuvimos tanto fluidez como acierto en ataque. Estábamos cómodos defendiendo y jugando al contragolpe", explicó García Valiente, para continuar analizando la segunda mitad: "Tras el descanso creo que no supimos mantener el control del juego. Se juntó la reacción de Grupo Covadonga con fallos de lanzamiento en posiciones francas en seis metros y eso nos fue minando poco a poco. Lo que, sumado a la locura en la que se manejó el segundo acto hizo difícil mantener el juego exhibido en el primer tiempo". Una realidad que, según su opinión, "no hizo peligrar el partido. Creo que la victoria estuvo siempre en nuestras manos, aunque es cierto que cuando caímos en una espiral de juego no tan buena de la que no supimos salir".

El entrenador del MMT Seguros aseguró también que lo que le falla a su equipo puede ser su regularidad a lo largo de un encuentro. Aunque, también aseguró que hay diversos factores que pueden influir en ese sentido. "Es cierto que nos falta regularidad pero es difícil lograrla porque en un partido hay rotaciones (hoy jugaron tanto Raúl como Maga en el tramo final), hay buenos momentos del rival y muchas circunstancias que hacen imposible estar siempre al mismo nivel. Eso sí, la meta es jugar los 60 minutos como hemos jugado la primera mitad, especialmente los 20 minutos sin encajar gol, porque si conseguimos eso seremos un equipo muy difícil de vencer", razonó.

Por último, García Valiente destacó el buen partido tanto de Fafa como de Ceballos, afirmando que el argentino "demostró las ganas terribles que tenía de jugar tras un Mundial difícil" y el chileno "pese a la fatiga lo puso todo en la pista para ayudar al equipo", afirmando que "es muy complicado estar un día entre los mejores del mundo con tu selección y, tres días después, jugar con tu club como si nada". Además, ensalzó el esfuerzo de Adrián "que jugó lesionado" y de un Jortos que "mostró que un buen capitán está ahí siempre, y aporta también desde fuera del campo".