El empate a cero con el que concluyó el partido del Benito Villamarín le sirvió de poco al Real Betis en el objetivo de mirar a zonas mas altas de la tabla, y de aún menos al Real Sporting de Gijón, conjunto con el que debutaba ayer como técnico Joan Francesc Ferrer "Rubi", encargado de iniciar la escalada desde el descenso de los asturianos tras la marcha de Abelardo. La pretendida reacción gijonesa se quedó a medias con un punto y poco fútbol ante un Betis también muy despistado y sin recursos en el ataque. Si es cierto que el equipo asturiano gozó de más orden en sus líneas y controló durante más tiempo y con más mimo el balón pero cometió los mismos errores que de costumbre frente a un Betis que no supo aprovecharlos, algo que también es costumbre para los andaluces.