El británico Andy Murray se impuso con solvencia ayer a David Ferrer, único español que quedaba en el cuadro masculino del torneo de Pekín, de categoría ATP 500 y pista dura, en las semifinales del mismo por 6-2 y 6-3, y jugará su novena final del año frente al búlgaro Dimitrov, hombre que eliminó a Rafa Nadal en cuartos de final y que avanzó hasta la última eliminatoria tras la retirada por lesión de Milos Raonic.

Al menos, el torneo de Pekín contará con representación masculina en una de sus finales, la del cuadro de dobles masculino. Un honor que correspondió a la dupla formada por Rafa Nadal y el asturiano Pablo Carreño, que superaron en semifinales a los temibles hermanos Bryan.