El Benavente cayó con estrépito en su visita a Valladolid en un partido que el equipo pucelano dejó visto para sentencia en tres minutos eléctricos que le sirvieron para redondear la cuenta que Altube había abierto al cuarto de hora de juego a pase de Iván tras un error de la zaga zamorana.

A partir de ese momento el choque se convirtió en un claro monólogo del Betis, que se adueñó de la posesión y disfrutó de las mejores ocasiones. El Benavente, por su parte, sólo lo intentó con disparos lejanos y en acciones muy aisladas. A pesar de todo, el equipo tomatero se mantuvo con vida hasta el tramo final del primer acto, cuando dos chispazos bastaron a los locales para finiquitar el duelo. Altube repitió plato tras una internada de Sanju por su banda y Manu sirvió el postre a su equipo con un cabezazo a la salida de un saque de esquina.

Tras el descanso el Benavente buscó la reacción, pero fue remar para acabar muriendo en al orilla. Berodas recortó distancias después de un saque de banda que le dejó solo ante Pablo y dio esperanzas al conjunto zamorano. La expulsión de Altube, autor de los dos primeros tantos pucelanos, por una tontería dio todavía más alas al Benavente, pero el gol de Iván a falta de un cuarto de hora para el final acabó con cualquier atisbo de remontada.