La selección española de fútbol sala se clasificó para los cuartos de final del Mundial de Colombia, donde se medirá con Rusia, después de deshacerse este miércoles con mucho trabajo de la correosa Kazajistán, a la que terminó derrotando por 5-2 tras un partido complicado y marcado por las decisiones arbitrales. La actual campeona de Europa no pudo finiquitar el encuentro hasta los minutos finales, justo cuando tiró de su calidad y experiencia para sujetar a su rival que jugaba en superioridad por la extraña expulsión de Sergio Lozano.

El jugador del FC Barcelona Lassa se lesionó solo en una jugada, pero el árbitro iraní Vahid Arzpeyma consideró que se había tirado y le mostró la segunda amarilla. Con uno menos, tocaba defender un gol de ventaja, pero el combinado nacional tuvo oficio para no solo aguantar su renta sino que aumentarla.

Por su parte, la selección de Irán ha protagonizado la gran sorpresa de este Mundial de Colombia al eliminar en octavos de final a la principal candidata al título, Brasil, que sucumbió en la tanda de penaltis tras un partido que finalizó con empate a cuatro goles.

El equipo brasileño, campeón en cinco de los siete Mundiales, quedó eliminada antes de semifinales por primera vez en su historia y lo hizo de manera muy sorprendente, ante un rival inferior que perdía por 3-1 a falta de nueve minutos para la conclusión.

Irán se sobrepuso al hat-trick de Falcao y mostró fe hasta el final para empatar sendos empates agónicos. En la tanda de penaltis, Irán acertó sus tres lanzamientos y Ari estrelló el suyo contra el poste, confirmando la que probablemente es la mayor sorpresa en la historia de los Mundiales.