El Fresno de la Ribera cayó ayer en goleado en su feudo por un Carbajosa de la Sagrada que sentenció el choque en apenas 25 minutos al saber aprovechar, a veces con fortuna, los fallos que cometieron los locales en su línea defensiva.

El partido arrancó con buenas sensaciones para los locales. El equipo de Canito tenía mayor posesión que su rival y gozaba de buen juego en zona interior con Carbajal y Eli como líderes. Sin embargo, las cosas no tardaron en torcerse.

A los ocho minutos, fallo en el control de balón de uno de los defensas dejó solo a frente a Carlos a Bustos quien, sin temblarle el pulso, abrió el marcador para los salmantinos.

El 0-1 no sería la única concesión rojiblanca durante el primer acto. Diez minutos después, un centro al primer palo era rematado con el exterior por Jorge Cruz entre dos defensores. Ni ellos ni Carlos pudieron evitar que el balón atravesara un barullo de piernas y se fuera a dormir a la red poniendo cuesta arriba el duelo para un Fresno que aún recibiría un mazazo más en forma de gol. Llegó en el minuto 23, cuando un balón largo se dirigía hacia Carlos que, con dudas en su salida, resbaló y puso en bandeja a Jorge Cruz el 0-3 que parecía dar carpetazo al choque.

Los hombres de Canito nunca tiraron la toalla y terminaron la primera parte acercándose a la meta del Carbajosa de la Sagrada con varios centros por banda de Oji pero sus pases no encontraron rematador y el marcador no se movió más hasta el descanso.

En la segunda mitad, al Carbajosa de la Sagrada le bastó con esperar en su campo para hacerse con el triunfo. Se dedicó a detener las acometidas de un Fresno de la Ribera lanzado al ataque pero que buscó la remontada con más corazón que cabeza y no atacó con las mismas buenas artes que en la primera mitad. Eso sí, se sintió más cómodo y protagonizó las ocasiones más claras de gol a excepción de una, la que supuso el definitivo 0-4, obra de Bustos en una contra ejecutada a la perfección por la escuadra charra cuya efectividad ayer fue decisiva.