Jaime Rosón confirmó su gran momento de forma tras acabar décimo séptimo en la etapa reina de la Vuelta a Burgos con final en las Lagunas de Neila. Este resultado le ha permitido acabar décimo tercero en la clasificación general y primer castellano-leonés de la competición.

Etapa con victoria para su compañero Sergio Pardilla con una ventaja que no fue suficiente para impedir el triunfo en la ronda burgalesa de Alberto Contador, segundo clasificado en la etapa. El pinteño consiguió mantener una diferencia mínima de un segundo tanto con Pardilla como con el tercero en pasar por la línea de meta, Ben Hermans, para vestirse de morado en el podio situado en las lagunas.

El zamorano trabajó durante la dura etapa para sus compañeros y se mantuvo en la parte final entre los favoritos hasta que se sucedieron los diferentes ataques que definieron las primeras posiciones.

Se avecinaba una etapa nerviosa y la jornada no defraudó. El juego de intereses de los diferentes equipos, conscientes de que la ronda se decidiría en las Lagunas de Neila, motivó un ritmo infernal desde lo primeros compases.

Fue en las primeras rampas de Neila, al paso por El Pasil de Rozavientos, cuando el pelotón consiguió neutralizar la escapada, momento que aprovecharon Michele Scarponi, Gianluca Brambilla y Giovanni Visconti para marcharse en solitario.

En el segundo paso por el Collado, Scarponi tiraba la toalla y arrastraba a sus dos compañeros, que también fueron neutralizados por el pelotón.

Sin embargo acabaría siendo Pardilla el encargado de lanzar el ataque definitivo a falta de 4 kilómetros. El del Caja Rural se marchaba en solitario, alcanzando una ventaja de más de 45 segundos, suficientes para adjudicarse la victoria final.

Por detrás, Contador y Hermans se quedaban solos en la persecución de Pardilla, que acabaría ganando la etapa. Eso sí, los 17 segundos de ventaja con los que atravesó la meta el del Caja Rural fueron insuficientes para batir a Contador, que consiguió dejar atrás a Hermans a falta de 400 metros con un fortísimo demarraje y asegurarse el triunfo final.