El jugador de los Memphis Grizzlies Mike Conley se convirtió ayer en el hombre mejor pagado de la NBA al firmar un nuevo contrato con su franquicia en el que cobrará nada menos que 153 millones de dólares por sus servicios durante los próximos cinco años. Conley, que había sido pretendido por los Dallas Mavericks, consiguió así pasar a la historia como el primer jugador que supera los 100 millones de dólares y otorga al jugador un salario anual de 30 millones de dólares, números a los que no llegan otros jugadores carismáticos como Lebron James o Stephen Curry, quienes a diferencia del compañero de Marc Gasol sí han sido jugadores de "All Star" en temporadas anteriores. Conley fue la noticia del día por el aspecto económico de su renovación en una jornada con múltiples cambios y fichajes en las plantillas de la mejor liga de baloncesto del mundo. Así, Dwight Howard abandonó los Houston Rockets para regresar a su casa con los Atlanta Hawks, mientras que Joakim Noah fichó por los New York Knicks; mientras, hombres como Whiteside, Beal, o Andre Drummond aceptaron las renovaciones de sus franquicias.