Turquía y Croacia abren hoy el Grupo D de la Eurocopa bajo el recuerdo de otros tiempos mejores para ambas selecciones. Croacia, más potente por la calidad de sus jugadores, mira constantemente de reojo al Mundial de Francia de 1998, en el que la generación de Suker, Prosinecki y Boban terminó tercera; en tanto, Turquía alcanzó su techo con la cuarta plaza en el Europeo de 2008, tras eliminar precisamente a Croacia en los cuartos de final.

La Croacia que dirige Cacic tiene una gran nómina de jugadores con Modric, Rakitic, Mandzukic o Kovacic al frente, quienes, como advertía el madridista Modric, deben "aprender a jugar como equipo para poder ganar como equipo".

La única baja de Cacic para este choque será la del sancionado Cop, aunque la ausencia del jugador del Málaga no trastoca los planes del entrenador, cuyo delantero titular es Mandzukic.

Enfrente Croacia se verá las caras con el "Emperador" Fatih Terim, artífice del resurgir del combinado otomano y que en su tercera etapa en el banquillo vuelve a imprimir su sello personal de lucha constante y entrega hasta el último minuto.

Turquía fía gran parte de sus opciones a las jugadas a balón parado, en el que cuenta con dos grandes especialistas como el barcelonista Arda Turam (que no llega al cien por cien) y Hakan Calhanoglu, centrocampista del Leverkusen, sus dos estrellas.