Juanjo, portero del GCE Villaralbo, conoció ayer los resultados de las pruebas médicas a las que se sometió la pasada semana y que arrojan que sufre un desgarro en el menisco. A pesar de que se confirma una lesión de rodilla, el meta no tiene dañados los ligamentos, que era el mayor de los temores del jugador y del propio club, y tampoco tiene fragmentado el menisco por lo que, en un principio, se descarta la cirugía.

No obstante, el cancerbero todavía no tiene confirmados los plazos de recuperación y será el traumatólogo quien analice la resonancia y radiografía para determinar el tiempo que debe estar parado, antes de comenzar la rehabilitación, y si puede o no llegar al play-off en caso de que los azulones se clasifiquen finalmente para la fase de ascenso, algo que tienen en su mano pero que tampoco será un camino sencillo para los de Tornadijo.

Con estos primeros datos, Juanjo explicaba que continuará guardando reposo hasta que le den permiso para iniciar ejercicios de rehabilitación y fortalecimiento de la articulación, aunque él "por el equipo" está dispuesto a forzar en caso de que fuese necesario. "Con el paso de los días me ha dejado de doler aunque sí que es cierto que a veces se me encasquilla, pero he mejorado mucho", comentó el azulón.

El almeriense, que cumple su segundo año en el GCE Villaralbo, ha disputado 29 partidos esta temporada y ayer se lamentaba por ese contratiempo que se produjo él solo en un entrenamiento, aunque también dejó claro que "Viti es un gran portero y va a hacer un buen papel".

Mientras, el resto del equipo prepara el importante encuentro de esta sábado en La Balastera y es que necesitan ganar al Palencia para mantener intactas todas las opciones de lucha por el ascenso.