No pudo el Caja Rural conseguir nada positivo en su visita al campo del Femiastur, donde cayeron por 3-1 en un partido que marcó un fallo defensivo de las zamoranas cuando el choque llegaba al descanso. Un tanto que desmontó el plan de las zamoranas que, pese a su positiva reacción mediado el segundo acto, vio su intento de remontada frustrado desde el punto de penalti con el 3-1 definitivo a falta de un cuarto de hora para el final.

Comenzó el encuentro con el Caja Rural bien plantado atrás intentando aguantar las acometidas locales. El Femiastur tenía el balón y buscaba la portería contraria, pero apenas conseguía generar peligro ante la bien plantada escuadra visitante.

El choque transcurría con lucha e intensidad, sobre todo en el centro del campo, pero sin apenas ocasiones claras de gol. Alguna llegada por parte local que abortaba bien la defensa zamorana y tímidos intentos por parte de un Caja Rural que sólo inquietaba en jugadas a balón parado.

Parecía que la primera mitad iba a acabar con el empate a cero inicial, pero entonces, en el minuto 44, Rebe en jugada individual se plantaba en el área contraria y, esta vez sí, sorprendía a la zaga visitante que parecía que daba ya por finalizada la primera mitad y no reaccionó. Y así, ante la pasividad de la defensa amarilla, las locales establecían el 1-0 al filo del descanso.

Un gol psicológico que hizo mucho daño a las visitantes, que volvieron a salir adormiladas tras su paso por vestuarios. Y así, a los 8 minutos de la reanudación, Rebe, en otra jugada individual, volvía a batir a la guardameta visitante, completamente vendida por una defensa inamovible. La jugadora local firmaba así una tarde espléndida en su regreso tras una larga lesión, firmando dos goles.

A partir de ahí el encuentro cambió. El Femiastur dio un paso atrás y cedió balón y terreno al equipo zamorano, que intentó estirar líneas para intentar meterse en el partido. Y parecía que lo conseguiría cuando en el minuto 68 Maria Jesús enviaba el balón al fondo de las mallas tras un buen centro de Cynthia.

Pero cuando mas volcadas estaban las visitantes en busca del gol del empate, en un contragolpe, el Femi astur conseguía forzar un penalti a favor. Era el minuto 76 y Carmen transformaba la pena máxima, convirtiendo el 3-1 que a la postre sería definitivo.

De ahí hasta el final el encuentro fue un querer y no poder de las zamoranas, que lo intentaban ya sin demasiada convicción ni peligro ante un rival pertrechado atrás, con una sólida renta y que no hizo concesiones para terminar por hacerse con los tres puntos en juego.