Al Real Madrid le falló el corazón y la puntería (7 de 24 triples) y acabó perdiendo por 63-75 ante un Fenerbahce que fue muy superior en los tres partidos de cuarto de final y que se clasifica con justicia para la Final a Cuatro de la Euroliga, que se jugará en Berlín. Privado de su mejor arma en ataque, el tiro exterior, el Real Madrid sufrió demasiado en la ofensiva, con lapsus de varios minutos que no sólo minaban su moral, sino que permitieron al Fenerbahce enjugar desventajas en los primeros instantes, o poner tierra de por medio en el marcador más tarde.

Por otra parte, una magnífica actuación coral del Barcelona, que tuvo en Alex Abrines (25 puntos, 6 triples, 24 de valoración) a su mejor hombre, permitió a los de Xavi Pascual volver a derrotar al Lokomotiv Kuban (82-70) y situarse a una victoria de clasificarse para la fase final de Berlín, con un baloncesto muy fluido, mucho control del juego y una buena defensa.