El Fresno de la Ribera siempre fue a contracorriente y cayó con justicia ante un necesitado Peñarando de Bracamonte en el Municipal Luis García. El cuadro zamorano fue a remolque de su rival durante los 90 minutos en un encuentro condicionado por el fuerte viento que sopló sobre el campo salmantino. El Fresno afrontaba el choque con la tranquilidad de no tener nada importante en juego, no así su rival dirigido por Jesús Benito.

Con todo, los morados iban a dejar claro desde el inicio que serían ellos quienes iban a dictaminar el cauce del duelo. Y es que en dos jugadas muy similares, los salmantinos se pusieron por delante con dos goles a favor, una losa pesada para los de Garrido. El primer gol de la tarde llegaría en un balón a la espalda de la defensa -ahí radicó la clave de la derrota-, con control de Antonio Romero y disparo ajustado al palo derecho de Sergio. Y minutos después (20´), era Herrera el que hacía morder el polvo a los zamoranos al recoger un rechace del meta a disparo de Mario y marcar el segundo. Ese temblor en la defensa fue corregido un minuto después, aunque parcialmente. Pablo Carbajal recibía un balón en tres cuartos, se giraba, volteándose hacia un disparo espectacular que superó por alto y desde unos 30 metros a Mateos. Golazo por la escuadra y 2-1 en el marcador. Sin embargo, otro cuero a la espalda de la zaga permitió que Mario llegase a línea de fondo y facilitase a Romero su segundo de la tarde para poner el 3-1 antes del receso.

En la segunda parte, mismos condicionantes pero con distinto guión. El Fresno supo jugar algo mejor con el fuerte viento a favor y, a pesar de no cuajar un segundo tiempo de grandes ocasiones, logró meterse de lleno en él primero tras un mano a mano fallado por Noel y después con el mismo jugador haciendo bueno un disparo desde fuera del área. El cuero pegó en un defensor, se coló en la red pero ya no hubo tiempo ni juego para más. El viento lo hizo imposible, la defensa colaboró y el Fresno se tuvo que conformar con la derrota final.