Tras el 0-4 del Santiago Bernabéu, a Rafa Benítez le llovieron las críticas por alinear un centro del campo con Modric, Kroos y James Rodríguez, arrasado por un Barça que, ante la ausencia inicial de Messi, reforzó la zona con Sergi Roberto. El único triunfador madridista del primer clásico de la temporada fue Casemiro, el hombre señalado para servir de dique al juego azulgrana. Salvo sorpresa de última hora, Casemiro será titular hoy en el Camp Nou, con la misión de dotar de equilibrio a un equipo marcado por su tridente de ataque. También el Barcelona puede presumir de su trío ofensivo, pero por ahí Luis Enrique tiene año y medio de ventaja respecto a Zinedine Zidane. El Clásico llega condicionado por los diez puntos de ventaja del Barça, pero hay coincidencia general en que eso no tiene mayor importancia cuando se juntan los dos grandes del fútbol español.

El Barcelona ha encadenado 39 partidos sin perder y aventaja en nueve puntos al segundo clasificado, el Atlético, y en diez a su rival de esta noche, pero del vestuario azulgrana no ha salido una palabra más alta que otra. Ni siquiera Piqué ha dado que hablar esta semana. "Preparado para el Clásico" ha sido su único mensaje en Twitter. Pero en el "entorno", como lo definió el hoy homenajeado Johan Cruyff, se palpa el optimismo. Pesa la clasificación, el recuerdo del 0-4 de la primera vuelta, el respaldo del Camp Nou y la posibilidad de que Luis Enrique alinee a su "once" de gala.

Las únicas bajas barcelonistas, las de los defensas Mathieu y Adriano, se consideran el mal menor después de una semana de riesgo por la cantidad de jugadores importantes que afrontaron partidos con sus selecciones. Ni siquiera la proximidad del partido de ida de la Liga de Campeones, el martes frente al Atlético de Madrid, desvía la atención de la cita más motivadora para ambos clubes cada temporada. Durante muchos años, el Clásico fue un consuelo para un Barcelona ayuno de títulos.

Esa sería la situación actual del Madrid si no le quedase la carta de la Copa de Europa. Desde Valdebebas se ha destacado la importancia de un buen resultado en Barcelona para afrontar los cuartos de final frente al Wolfsburgo. Además, después de una campaña muy accidentada por las lesiones, Zidane tiene a toda la plantilla a su disposición salvo Varane, que regresó con un problema muscular de sus compromisos con la selección francesa. Confirmada la pareja Pepe-Sergio Ramos en el centro de la defensa, la única duda es el elegido para el lateral derecho: Carvajal o Danilo. Los descartados para el clásico son Kovacic y Arbeloa.

Los jugadores del Madrid, muy criticados por su actitud en el clásico de la primera vuelta, han recalcado durante la semana en la importancia del partido, más allá de su influencia en la clasificación. "Nos vamos a dejar el alma", escribió Casemiro en su cuenta de Twitter. "En el Madrid no se pueden bajar los brazos", advirtió Keylor Navas, uno de los jugadores que se presume decisivos esta noche por el buen estado de forma que ha mostrado en los últimos partidos.

Lógicamente, a la hora de buscar las claves todos miran a los dos tridentes más goleadores del mundo. De momento, el formado por Messi (22), Luis Suárez (26) y Neymar (21) supera al de Bale (15), Benzema (20) y Cristiano Ronaldo (28), aunque los madridistas presentan un mejor promedio al llevar diez partidos menos (6.865 minutos la MSN por 5.597 la BBC).

El de hoy número 232 de la historia de los clásicos. La estadística favorece ligeramente al Madrid, con una victoria más (92 por 91) que el Barcelona. En el apartado goleador también hay una ligera ventaja blanca: 389 dianas, por 378. Los dos grandes del fútbol español se han cruzado en seis competiciones diferentes: Liga (en la que llevan 171 partidos), Copa del Rey, Supercopa de España, Copa de Europa, Copa de la Liga y la Copa Coronación.