El F. C. Barcelona estrena hoy su liderato más amplio en la Liga BBVA con la visita a la Unión Deportiva Las Palmas, duelo en el que no quiere despistes ni con el horario -tres de la tarde hora local-, ni con la supuesta debilidad del rival ni con la Liga de Campeones, cuyos octavos de final iniciará tres días después en el Emirates Stadium.

El equipo azulgrana vuelve a jugar contra Las Palmas en una situación diametralmente opuesta al duelo de ida, recordado por la lesión de Leo Messi que hizo enmudecer al Camp Nou y que dejó al Barça huérfano de su líder durante dos meses. Además, aquella sufrida victoria (2-1) se produjo entre las dos derrotas encajadas por el líder esta temporada ante Celta (4-1) y Sevilla (2-1).

Casi cinco meses después, Luis Enrique y sus pupilos atraviesan una situación idílica, ya clasificados para la final de Copa y con seis y siete puntos de renta sobre Atlético de Madrid y Real Madrid, respectivamente, tras recuperar su partido aplazado ante el Sporting. Con 14 jornadas por disputar y un único duelo directo ante sus perseguidores en el horizonte -el Clásico en el Camp Nou-, el Barça sabe que solo sus errores pueden apartarle del 24º título de Liga.

El equipo azulgrana iniciará el próximo martes en Londres el asalto a la "presa" más importante de esta caza de títulos, la Liga de Campeones, con un duelo exigente ante el Arsenal que previsiblemente provocará otra ronda de rotaciones en la alineación de Luis Enrique.

"Si hay alguien que ha demostrado que cada tres días compite, independientemente del rival y la competición, somos nosotros. Si no salen las cosas como queremos no será porque estamos pensando en el Arsenal, sino porque hemos estado mal o el rival ha sido mejor", aclaró el técnico, antes de recorrer los casi 2.200 kilómetros que separan Barcelona de Las Palmas.

Ausencia obligada será la del sancionado Sergio Busquets, que cumplirá ciclo de amonestaciones, por lo que Javier Mascherano y Sergio Roberto, ninguno titular en El Molinón, se disputan la titularidad en el pivote defensivo. Tampoco jugaron en la ciudad asturiana Andrés Iniesta, Dani Alves y Jordi Alba, que apuntan a recuperar la titularidad. Y como siempre, intocable el tridente ofensivo.

Una isla de mal recuerdo

El Barcelona vuelve a una isla que históricamente le trae malos recuerdos, ya que solo ha sumado 10 victorias en 31 partidos ligueros, por 17 victorias del equipo local y 4 empates. En su última visita fue incapaz de marcar (0-0), pero ese precedente data de la temporada 2001-02, cuando Luis Enrique era jugador blaugrana.

Ascendido el pasado verano, el equipo insular está viviendo toda la temporada al filo del descenso y actualmente ocupa el antepenúltimo puesto, a un punto de la salvación.

La Unión es, junto con el Sevilla, uno de los dos equipos que aún no ha ganado fuera, pero en el Estadio de Gran Canaria está rindiendo a buen nivel y suma 18 de sus 21 puntos, una fortaleza casera que ya conocen Sevilla o Celta, ambos derrotados en la isla.

Quique Setién, que asumió el banquillo en octubre, ha inoculado su gusto por el buen fútbol al equipo, pero le está costando traducir esa apuesta en goles. Este sábado, sufrirá las importantes bajas del lesionado Simón y el sancionado Wakaso, aunque espera que el talento ofensivo de Jonathan Viera y Willian José le permita inquietar al líder.