Fernando Verdasco dijo ayer adiós al Abierto de Australia, primer "Grand Slam" de la temporada, en una jornada que estuvo marcada por la emotivda despedida del héroe local Lleyton Hewit, quien perdió con David Ferrer en segunda ronda.

El verdugo de Rafa Nadal en primer ronda, Fernando Verdasco, ofreció ayer su peor cara y perdió ante el israelí Dudi Sela. El imprevisible jugador madrileño cometió más del doble de errores no forzados que su rival, por lo que Sela venció por 4-6, 6-3, 6-3 y 7-6 (4), en un duelo en el que pareció sacar mucho partido del esfuerzo realizado por el español para eliminar a uno de los favoritos.

No fue la única derrota española en la jornada de ayer, ya que Granollers dijo también adiós al torneo al caer frente al "gigantón" Isner 6-3, 7-6 (6) y 7-6 (2); y Robredo no pudo con el decimotercer favorito, Raonic, que como el americano ganó con apuros y gracias a su saque (7-6 (6), 7-6 (5) y 7-5). Aún así, la jornada también tuvo buenos resultados para el tenis español.

Feliciano López se plantó en tercera ronda tras superar un complicadísimo partido con cuatro desempates frente al argentino Guido Pella 7-6 (2), 6-7 (4), 7-6 (3), 6-7 (8) y 6-4; y, en el cuadro femenino, Garbiñe Muguruza eliminó a la incómoda Kirsten Flipkensa por la vía rápida (6-4 y 6-2). Aunque, sin duda, la victoria española más importante del día fue la de David Ferrer, ya que se impuso al australiano Lleyton Hewitt en el que fue el último partido del héroe "aussie". Todo un exnúmero uno que dio guerra al alicantino (6-2, 6-4 y 6-4 ) vitoreado por un Rod Laver Arena que vistió sus mejores galas y disfrutó por última vez de su gran ídolo.