El exvicepresidente de la FIFA Eugenio Figueredo, en prisión preventiva en Montevideo por presuntos delitos de estafa y lavado de activos al frente de la Conmebol, fue trasladado a un centro hospitalario aquejado de una afección cardiaca, informó a Efe su abogada, Karen Pintos.

Figueredo sufrió una "afección cardiaca" y fue trasladado a un hospital de la mutualista Asociación Española, donde "dependiendo de su estado de salud" y "si los médicos lo autorizan" puede quedar hospitalizado, dijo Pintos.

El expresidente de la Conmebol, que estuvo preso en Zúrich desde mayo por una investigación anticorrupción de la Justicia de Estados Unidos contra altos cargos de la FIFA, llegó extraditado a Montevideo para declarar en el juzgado de Crimen Organizado acusado de estafa y lavado de dinero cuando dirigía el ente sudamericano.

Horas antes de la audiencia y mientras Figueredo aún volaba hacia la capital uruguaya, Pintos manifestó a Efe que su defendido llegaba "en un estado de salud delicado", a lo que se sumaba su avanzada edad, 83 años.

"Sus problemas de salud están certificados y van a ser valorados por un médico forense, pero prefiero no manejarlos públicamente por respeto a su familia", agregó la abogada, que recordó que antes de su privación de libertad "ya padecía un cúmulo de enfermedades".

Por todo ello, Pintos pidió en la audiencia prisión domiciliaria para su cliente, pero le fue denegada por la jueza Adriana de los Santos.

Tras prestar declaración durante varias horas ante De los Santos y el fiscal Juan Gómez, Figueredo fue procesado con prisión preventiva.

Los hechos que se le imputan "quedaron plenamente acreditados" por su declaración, manifestó Gómez a los medios tras la audiencia judicial.

El llamado caso Conmebol indaga una denuncia interpuesta a finales de 2013 por varios equipos de fútbol de Uruguay y por la Mutual de Futbolistas del país, que acusaban de la existencia en ese organismo de una "organización criminal" que se apropiaba de dinero que tendría que ir a parar a clubes, a jugadores y a la propia organización.

Entre los involucrados está el uruguayo Figueredo, exvicepresidente de la FIFA (2014-2015) y de la Conmebol (1993-2013), así como expresidente de la misma entidad (2013 y 2014).