Los triples y la calidad individual de los jugadores del HiLED Queso Zamorano permitieron ayer una victoria zamorana que se fraguó en el último cuarto tras un encuentro irregular en el que se vieron las caras dos grandes equipos. Los de Saulo Hernández se colocan así terceros en la clasificación gracias a un triunfo que costó, y mucho, y es que los fallos propios pasaron factura ante un Fundación de León que también demostró sus credenciales. Que no iba a ser un partido fácil se sabía desde antes del comienzo del encuentro, pero se confirmó en los primeros compases en el Ángel Nieto y es que se vio pronto que no era el mejor día del CB Zamora. La falta de acierto bajo el aro y, sobre todo, los fallos defensivos daban vida a unos leoneses que penetraban con suma facilidad y que lograban pequeñas ventajas. Con ráfagas de calidad, los locales volvían a poner el equilibrio en el marcador, sobre todo gracias a los tiros de tres que les salvaron durante los cuarenta minutos (14-16). La misma tónica continuó en el segundo tramo aunque tres triples consecutivos dieron la vuelta al luminoso y por primera vez los de Saulo se pusieron por delante (25-19). Ahí el equipo empezó a funcionar y logró pequeñas rentas pero en cuanto levantan el pie del acelerador, volvían a aparecer los desajustes que daban vida a su rival con el que, por cierto, estaban empatados a cuatro triunfos. Los leoneses aprovechaban cualquier debilidad zamorana para meterse de nuevo en el partido y sobre la bocina ponían el 35-34 con el que se llegaba al descanso. El segundo tiempo fue más de lo mismo, con un HiLED que no lograba la suficiente renta como para sentenciar pero que por momentos brillaba con jugadas individuales y canastas imposibles. Con 57-55 el final de infarto estaba asegurado, pero el CB Zamora quería evitarlo y lograron ponerse diez arriba en lo que fue la máxima ventaja (70-60, min. 35). A partir de ahí, un parcial de 0-5 volvió a despertar las alarmas pero Saulo pidió tiempo muerto, reajustó a los suyos, que mejoraron en labores defensivas, para atar un triunfo que les permite irse de vacaciones de Navidad terceros en la tabla de clasificación.