La selección española de balonmano femenino se impuso (31-10) sin problemas ante Kazajistán para debutar con victoria en el Campeonato del Mundo de Dinamarca 2015 en el Arena Nord de Frederikshavn, cumpliendo con el guión exigido para ganar ritmo y nivel de competición de cara a los rivales más exigentes del Grupo D.

Las "guerreras" tuvieron un buen arranque en el Mundial, con minutos de intensidad y una gran Silvia Navarro bajo palos, pero también mostraron su margen de mejora. El buen parcial de inicio perdió efectividad ofensiva en el tramo final de la primera mitad a pesar de lo cual el partido quedó ya sentenciado (16-5) al descanso con la buena noticia además del regreso de Lara González. Jorge Dueñas arengó a las suyas después de un comienzo flojo también del segundo periodo y las rotaciones funcionaron con mayor acierto.

El objetivo de crecer de cara a los duelos ante Rusia, Rumanía y Noruega se vio cumplido, además de la importancia de un triunfo para estrenar la competición. Carmen Martín, autora de siete tantos, fue la mejor del partido.

La almeriense, junto con Eli Pinedo y Marta López (autoras de cinco tantos), llevaron el peso atacante de España. En la primera mitad, sin duda la actuación de la meta Silvia Navarro volvió a ser más que destacable. La valenciana se encargó incluso de montar los rápidos ataques que pronto abrieron brecha (7-1). Las imprecisiones sin embargo acompañaron a la subcampeona europea. Y es que el estreno, ante una rival 'menor', dejó altibajos en el conjunto español, también propios del debut. Momentos de mucha intensidad y acierto y trances con lagunas a tiempo de resolver. En el inicio de la segunda mitad, las kazajas aprovecharon ese momento de zozobra española para intimidar de la mano de Tankina, que con cuatro goles terminó como máxima anotadora de las suyas.

Dueñas pidió reacción y España volvió a meterse en el partido. Con Zoqbi manteniendo el nivel en portería, Eli Pinedo y Marta López elevaron sus cuentas para poner una inercia positiva que aún no fue suficiente para el seleccionador nacional. A Dueñas le escoció hasta el último gol encajado en el último segundo, no sólo por la importancia del "gol average" sino sabedor de que un Mundial obliga al máximo en cada jugada.