En el primer cuarto los zamoranos salieron muy acertados desde la línea de 6,75, anotando cuatro triples consecutivos que permitieron disfrutar a los amarillos de una ventaja de 8 puntos que dejaba bastante encauzado el primer cuarto. Sin embargo, un "baile" de zonas defensivas de León, consiguió detener el ataque local y reducir distancias hasta mostrar un 22-19 al final del cuarto.

El segundo cuarto fue una prolongación y los zamoranos no conseguían anotar en la canasta rival y un cúmulo de errores y pérdidas de balón; hicieron que al descanso el marcador reflejase un 32-40. La segunda parte sólo hubo un equipo sobre la pista, y ese fue el conjunto leonés, que veía con facilidad el aro, y conseguía parar cualquier tímido atisbo de remontada de los zamoranos.