El Vilken Mañanes cayó derrotado en casa del colista, el Cistierna, que sumó, con fe, tres puntos balsámicos que le sirven para coger un poco de moral.

El partido estuvo igualado hasta los últimos minutos. Los benaventanos buscaron el gol, y lo tuvieron, pero no supieron aprovechar sus opciones a lo largo de los cuarenta minutos. No obstante, Álex adelantó a los visitantes con un buen gol, que parecía presagiar otra derrota local, aunque todo fue un espejismo, y es que Héctor, en un error, anotó en propia puerta y dio esperanzas a los locales.

Fue ya en el segundo tiempo cuando llegaron los goles y la derrota para los de Santi Calero. Los locales consiguieron el 2-1 mediante Javi Fernández, y después fue Borja (Falcao) quien llevó la manija atacante con dos goles, uno de ellos de doble penalti, que sirvió para dar un puñetazo encima de la mesa y poder llevarse una victoria decisiva para poder encara el futuro con un poco más de fuerzas. A pesar de los tiempos muertos pedidos por Santi Calero para intentar hacer reaccionar su equipo, lo cierto es que el Benavente no existió en los últimos compases de encuentro, cosa que aprovechó un superior Cistierna para llevarse la primera victoria del año.