La octava jornada de la Liga aprieta la cabeza de la clasificación, con Real Madrid, Celta y Barcelona empatados en cabeza tras sendas victorias sobre el Levante (3-0), el Villarrreal (1-2) y el Rayo Vallecano (5-2), respectivamente

Marcelo iluminó al cuadro de Rafa Benítez cuando más lo necesitaba, después de que el costarricense Keylor Navas hubiera tenido que abortar con magníficas intervenciones las ocasiones del Levante.

El lateral izquierdo es un desatascador de primera magnitud. Es un desequilibrio permanente en sus subidas. En una de ellas, tras robar el balón a un rival, hizo la pared con Cristiano Ronaldo y puso en ventaja al cuadro blanco, que aprovechó poco después otro fallo de la zaga levantinista para reencontrarse con el gol y sentenciar el choque con un poderoso disparo del luso.

Benítez, que tenía numerosas bajas por lesiones, pudo incluso dar descanso al galés Gareth Bale pensando en el difícil compromiso de Liga de Campeones en el feudo del París Saint Germain, y en el segundo periodo la mejor noticia para su equipo fue el reencuentro con el gol del canterano Jesé Rodríguez.

Ausente el argentino Messi por su lesión, Neymar se echó al Barcelona a sus espaldas y con su habilidad destrozó a un Rayo Vallecano que se había adelantado en el marcador por medio de Javi Guerra al cuarto de hora.

La zaga del valiente equipo rayista no pudo resistir las diabluras el brasileño, que forzó varios penaltis, de los cuales el colegiado decretó dos, aprovechados con precisión por el exjugador del Santos para remontar en diez minutos (m.22 y 32).

El Rayo mereció más en el segundo periodo, pero no supo aprovechar sus ocasiones ante el meta chileno Claudio Bravo. Cuando peor lo pasaba el Barcelona, Neymar hizo el resto con otros dos goles seguidos (m.69 y 70) y una asistencia al uruguayo Luis Suárez (m.77) en tres latigazos letales.

Un duro castigo para el conjunto de Paco Jémez, que como el de Lucas Alcaraz en el Bernabéu, dio la cara y agradó pero acabó goleado. Jozabed Sánchez al final estableció el marcador definitivo.

El domingo, por su parte, el Celta, con un gol de Nolito al final asaltó en El Madrigal al Villarreal (1-2), con lo que el conjunto castellonense cedió el liderato al Madrid.

Mientras tanto, el Atlético de Madrid puso fin a su racha de tres partidos sin ganar (incluido el de Liga de Campeones contra el Benfica) y recompuso su figura en Anoeta, donde venció lanzado por el francés Antoine Griezmann, exdelantero de la Real Sociedad.

El conjunto del argentino Diego Pablo Simeone se instala con 16 puntos, a dos del trío cabecero e igualado con el Villarreal.

El chileno Fabián Orellana y el andaluz Manuel Agudo 'Nolito' fueron los estiletes de un Celta que frustró el liderato del Villarreal, que acusó la expulsión del marfileño Eric Bailly, lo que le obligó a jugar todo el segundo tiempo en inferioridad numérica.

No obstante, aún así tuvo arrestos para equilibrar por medio de Denis Suárez (m.67), cuyo disparo rozó en un defensa, el tanto en el primer periodo de Orellana.

El chileno también fue protagonista del definitivo 1-2, que llegó en el minuto 90. Se sacó un estupendo disparo colocado que se estrelló en el larguero. Nolito culminó su partido al aprovechar el rechace y marcar con un tiro cruzado y raso.

Mientras tanto, Griezmann emergió ante su anterior afición para conducir el reencuentro del Atlético con el triunfo (0-2) con un magnífico tanto a los nueve minutos, al culminar con una precisa vaselina una espectacular internada desde la medular.

No obstante, no brilló el conjunto madrileño, que sufrió por momentos en el segundo periodo ante el acoso del cuadro donostiarra, cuya afición ovacionó a Griezmann cuando fue sustituido a cuatro minutos del final, pese a ser el principal culpable de la derrota del equipo del escocés David Moyes.

El belga Yannick Ferreira Carrasco escribió el último capítulo del choque en la prolongación al culminar un contragolpe justo después de que la Real Sociedad reclamase una pena máxima.

El sábado, el Eibar y el Sevilla firmaron tablas (1-1) en un choque en el que mandó el conjunto vasco en el primer periodo y el andaluz en el segundo.

Borja Bastón inauguró la cuenta a los ocho minutos para ratificar la superioridad eibarresa ante un conjunto sevillista sin rumbo ni fútbol.

Tan solo cuando Unai Emery recurrió a la habilidad y velocidad del ucraniano Yevhen Konoplyanka y al manejo del argentino Ever Banega se reencontró con el partido y pasó a mandar.

El francés Kevin Gameiro logró la igualada a los 71 minutos con un remate poco ortodoxo pero efectivo con el muslo. El acoso furibundo de un Sevilla necesitado de la victoria no encontró más recompensa que el empate.

El Eibar queda por lo tanto instalado en la zona alta de la tabla y el Sevilla pierde otros dos puntos importantes en su intento de acercarse a los puestos europeos, que se alejan cada vez más.

El domingo, el Deportivo salvó un punto a la heroica ante el Athletic, que dominaba por 0-2 y tenía el partido controlado en Riazor, pero no supo defender la ventaja y acabó permitiendo la reacción del cuadro de Víctor Sánchez del Amo.

Iñaki Williams, con una volea a la media hora, y Aritz Aduriz, con un preciso toque sutil (m.63), parecieron sentenciar el choque, pero no fue así, porque el Deportivo no se rindió y revivió con un gran gol a la media vuelta de Lucas Pérez (m.80).

El cuadro gallego se volcó al ataque y Alejandro Arribas culminó una larga acción a los 89 minutos con un remate de cabeza cercano que desvió un defensa del cuadro vizcaíno, que se podía haber quedado muy cerca de Europa de haber ganado. El que entra en la zona de privilegio es el Deportivo, que arrebata la sexta plaza al Eibar.

El Getafe prosiguió con su escalada y dejó más tocado a Las Palmas con una goleada (4-0) en el Coliseum Alfonso Pérez. El equipo de Fran Escribá quiere convertir su campo en un fortín y lo está consiguiendo. Sumó su tercera victoria como local seguida y su tercer encuentro sin perder.

En esta ocasión, se vio favorecida este pretensión por el efectivo inicio de partido, en el que Víctor Rodríguez y Pablo Sarabia encarrilaron el triunfo en los diez primeros minutos.

Los hombres de Paco Herrera, penúltimos, apenas tuvieron capacidad de reacción bajo la lluvia y en los últimos compases, con un hombre menos por expulsión del argentino Juan Culio, encajaron un doblete del serbio Stefan Scepovic.