Gerard Piqué, central internacional del Barcelona, mostró su punto de vista sobre los silbidos que ha recibido en los dos últimos partidos de la selección en España, en León y Oviedo, a horas de ver la reacción de Logroño con la idea de que "el tiempo" arreglará la actual situación.

"Cada uno se pone en su sitio con el tiempo, al final con el tiempo se arreglará, tengo toda la confianza del mundo de que va a ser así", aseguró en una entrevista en Radio Marca cuando fue preguntado por la campaña 'Aplaudamos a Piqué' para el encuentro en Las Gaunas ante Luxemburgo del viernes.

Piqué participó en un programa especial por el centenario con la selección que cumplirá Cesc Fábregas en su próxima participación. Dedicó buenas palabras a su gran amigo recordando cuando se fue siendo un niño al Arsenal.

"Él fue el pionero, el más atrevido y valiente. Luego vimos que funcionaba y nos apuntamos otros, pero Cesc fue el primero. Ahora parece mucho más fácil. Todo el mundo se va a Inglaterra, pero en ese momento era difícil tomar la decisión que él tomó. Se ha de valorar muchísimo con 16 años cambiar el club de tu vida, el Barça, por una experiencia en Inglaterra, donde le aseguraban muchas cosas, pero tenía que dejar la familia y los amigos. Es algo que fue un ejemplo para muchos, para mi el primero que al siguiente año tomé la misma decisión", valoró.

Recordó Piqué la presión que metió con Carles Puyol para que Cesc regresase al Barcelona y la sensación que se le quedó cuando tras compartir tres temporadas, regresó a Inglaterra para firmar por el Chelsea.

"Fue mucho trabajo insistiendo. Puyol y yo estuvimos con el presidente, la junta directiva, con Cesc que tenía sus dudas de un cambio tan grande, de ser la estrella en el Arsenal el número uno, siempre es difícil cambiar, pero al final lo conseguimos. Me acuerdo la celebración del Mundial poniéndole la camiseta del Barça", recordó.

"Lo conseguimos y pasamos tres años muy buenos cumpliendo nuestro sueño de pequeño desde las categorías inferiores. Que se fuera Cesc fue un golpe duro a nivel personal, se me iba un gran amigo y a nivel de equipo se iba uno de los mejores jugadores que teníamos. Entendía su situación, su postura porque luego a nivel personal cada uno tiene sus opiniones, pero fue un golpe duro", añadió.