El Fútbol Sala Zamora sumó ayer su primer triunfo de la temporada ante un recién ascendido como es el Real Betis FSN con el que medía fuerzas en un duelo de necesitados. Ambos ofrecieron un alocado y emocionante partido que se resolvió como tantos otros merced al mayor acierto de cara a puerta. Con una igualdad casi total, en un choque marcado por los muchos errores y el poco control, la victoria del Zamora tiene el mérito añadido de haberse producido después de ir siempre a remolque de marcador.

No habían pasado ni treinta segundos cuando Chicho cometía la primera falta de los visitantes. El Zamora salió fuerte tratando de presionar arriba para robar en zona peligrosa, pero se encontró con un conjunto local que respondió de idéntica manera. Con los dos enzarzados en el correcalles el local Paco tuvo la primera de la tarde. Un minuto más tarde, sin control alguno, el Real Betis se aprovechaba de un fallo defensivo tremendo del Zamora y entre Miguel y Keko se lo montaban para marcar en boca de gol ante un Gómez que incluso logró rechazar en primera instancia. Sin tregua alguna, nada más sacar de centro Saldise se quedaba totalmente solo ante el portero verdiblanco pero no era capaz de definir, y segundos más tarde Pintado imitaba a su compañero.

Con el partido loco nadie controlaba el cuero por mucho tiempo y los errores de ambos se sucedían sin pausa. Durante los diez primeros minutos de juego se vieron constantes robos y los consiguientes contragolpes y jugadas en superioridad, pero pese a las múltiples opciones de gol en ambas porterías, el zamorano Pedrito marró dos inmejorables y consecutivas, ninguno era capaz de definirlas y el Betis se mantenía por encima. Hasta que en el minuto nueve, con en el enésimo robo de la tarde, esta vez frente al área local, Pedrito se aprovechaba de un rechace del portero tras un disparo franco y anotaba el empate a uno. La igualada coincidía con una fase de dominio zamorano, pero el nuevo resultado no calmó los ánimos y la pelea continuó sin pausa. Nadie renunciaba y solo en el último tramo, y sin variar la dinámica de idas y venidas, el juego tuvo algo más de control, pero no en cuanto a posesión pues ninguno se imponía, pero sí en lo referente a ocasiones ya que ambos quintetos arriesgaron mucho menos o al menos en zonas no tan conflictivas.

Salió algo mejor el Betis en la segunda y lo rentabilizó a la perfección porque a los tres minutos Nene marcaba tras una superioridad muy bien llevada por Paco. Tras el gol el Zamora pasó por su peor momento y los locales tuvieron un par para ampliar su ventaja. La banqueta zamorana se movió rauda pero el Betis se sentía ahora más cómodo en defensa y suyos eran los mejores contragolpes, amén de que contaba con la suerte pues el palo rechazó el disparo del zamorano Pedrito en una llegada aislada. Quedaban más diez para la conclusión y al portero zamorano Gómez se le veía mucho fuera de su área actuando de quinto jugador pero sin cambiarse de camiseta. Zamora apretaba con todo pero el reloj corría y eso indicaba que ya no había margen de error. En el tramo final los dos se vaciaron por completo y el choque ganó en emoción, principalmente porque volvió el descontrol de los inicios y cualquier cosa podía suceder. Tanto Betis como Zamora tuvieron las suficientes para ello, Gómez rechazó una imposible a contrapié, pero el único que acertó fue Pintado a tres de la conclusión en una jugada de estrategia perfectamente cocinada en la que la pelota traspasó la línea mucho suspense.