El Barça regresó ayer a los entrenamientos, tras una jornada de descanso, para preparar a puerta cerrada el partido demañan en el Camp Nou contra el Levante (20.30 horas).

Luis Enrique dio una jornada de descanso a los suyos para abrir un paréntesis debido a lo cargado que empieza a resultar el calendario para sus jugadores, especialmente los internacionales, también en parte por ausencias como la de Rafinha, notable ausente ayer en la primera sesión tras el empate frente a la Roma.

El jugador carioca será operado la semana que viene de la rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Una lesión que le une a una ya nutrida lista de ausentes en la que también figuran el portero Claudio Bravo, y los defensas Thomas Vermaelen, Douglas y Dani Alves. Bajas que condicionan el próximo partido del conjunto blaugrana yque obligarán a Luis Enríque a buscar una nueva alternativa a la sanción de Piqué (al que le resta ester partido para volver) y a contar una vez más con la cantera. Lugar del que llegó ayer al primer equipo Gerard Gumbau Garriga, del filial, quien podría aportar al equipo hasta que Arda Turan y Vidal puedan debutar en enero.